Cien hectáreas de coca, el motor de la violencia en zona rural de Jamundí

En los sectores de La Liberia y Villacolombia, zona rural de Jamundí, hay tensión por los recientes combates del Ejército con presuntos disidentes de las Farc que dejaron el fin de semana un militar muerto y cinco heridos.

El domingo pasado, al paso de una comisión del CTI y miembros de la Tercera Brigada, fue activada una carga explosiva cuando la caravana transitaba por un estrecho camino de la vereda La Cabaña. Tras la detonación, los funcionarios y militares fueron atacados con disparos de fusil.

Horas después, hacia las 9:00 a.m. y cuando otros militares llegaron al sitio del atentado, se registraron tres combates contra un grupo de 15 hombres.

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Más de 150 uniformados, desde hace 20 días, mantienen operaciones en la zona contra un grupo de 25 personas que no se acogieron al proceso de paz y que, según información de la Tercera Brigada, se estarían financiando del narcotráfico, pues en esa zona rural de Jamundí hay más de 100 hectáreas de hoja de coca sembradas.

Las operaciones en tierra están siendo apoyadas por aeronaves del Comando Aéreo de Combate No. 7. Participan en esas operaciones un avión fantasma, dos helicópteros (uno artillado) y otros aviones equipados para hacer trabajos de inteligencia.

Al respecto, el coronel Andrés Guzmán Morales, comandante de dicha unidad aérea, con sede en Cali, explicó que desde julio pasado, cuando asumió la comandancia, se han realizado cinco operaciones aéreas contra el narcotráfico en La Liberia y Villacolombia.

“Nuestro trabajo consiste en hacer un rastreo de las diferentes zonas para ubicar los cristalizaderos y advertir al Ejército de la existencia de estos para que ellos adelanten las operaciones en tierra para desmantelarlos”, explicó el Coronel.

El oficial afirmó que la topografía de la parte alta de Jamundí, caracterizada por la presencia de sistemas montañosos, facilita la huida de los delincuentes hacia el Cauca y el Pacífico. Por momentos, las aeronaves de la Fuerza Aérea no han podido apoyar a los militares en tierra por nubosidad en la zona, dijo el Coronel.

El coronel Pablo José Blanco Botía, comandante de la Tercera Brigada del Ejército, dijo que la intervención militar pretende controlar el movimiento de insumos químicos para la producción de coca, el ‘combustible’ de la presunta disidencia que actúa en la zona.

“Las operaciones están centradas en La Liberia y Villacolombia, en especial en el sector donde se presentaron los combates el domingo. Vamos también tras los laboratorios”, dijo.

El soldado asesinado fue identificado como Diego Armando Fonseca, de 18 años, quien recibió un disparo en el hombro izquierdo.

A mediados de octubre, el mismo Coronel, le dijo a este diario que el reducto de las antiguas Farc, que está en la zona, estaba a cargo de ‘El Burro’ y ‘El Enano’, el primero de ellos antiguo miembro del Sexto Frente. Sin embargo, en las últimas semanas el mando del grupo habría sido asumido por alias Andrés, a cuyas órdenes estarían trabajando las otras dos personas.

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“Es un grupo conformado por hombres que siempre estuvieron delinquiendo en la zona. Hablamos de las compañías Miller Perdomo y Ambrosio González (del viejo Sexto Frente); y el Frente Urbano Manuel Cepeda Vargas”, dijo el oficial.

Desde que iniciaron las operaciones en la zona rural de Jamundí, hace unas dos semanas, se han desmantelado seis laboratorios e incautado 200 kilos de cocaína, así como más de tres mil galones de insumos líquidos para procesar la droga.

Líderes de la vereda La Esperanza, en jurisdicción de Buenaventura, denuncian la creciente siembra de cultivos de hoja de coca cerca a la vía que lleva al Puerto.

La Gobernación anunció más controles contra los cultivos ilícitos en esta zona y en la parte alta del municipio de Jamundí.