El peligroso ‘ritual’ que hizo Nacho Vidal y por el que será juzgado por homicidio

El actor, director y productor de cine para adultos Nacho Vidal se deberá a enfrentar a un juicio al ser acusado por el delito de homicidio imprudente tras haber participado de un ritual con metilfubotenina, una sustancia extraída del veneno de un sapo de especie bufo alvarius.

De acuerdo con las autoridades españolas, existen suficientes indicios para enjuiciar a Ignacio Jordà y otros dos implicados en la muerte del fotógrafo José Luis Abad, el 28 de julio de 2019, por medio del ritual del sapo bufo.

¿Cómo es el ritual del sapo bufo?

Este ritual también es conocido por el nombre de la “molécula de Dios”, que implica fumar el veneno del sapo, el cual es nativo del desierto de Sonora, México, y produce en sus glándulas parótidas un veneno que contiene bufotenina, un alucinógeno muy potente para los seres humanos.

El ritual consiste en que las personas se sitúen en un entorno tranquilo, el cual es guiado generalmente por un chamán o facilitador. Después, se debe extraer el veneno del sapo y se administra a las personas en dosis pequeñas, generalmente mediante inhalación.

Los efectos del veneno se manifiestan de manera rápida por medio de alucinaciones visuales y auditivas intensas, la cuales duran cerca de 30 y 60 minutos.

Este proceso es muy peligroso, ya que puede ser mortal si se administra incorrectamente o con síntomas como náuseas, vómitos, mareos, taquicardia y ansiedad durante la experiencia. Esta práctica es muy común y cada vez son más las personas que se atreven a probar este tipo de ritual por sus supuestas propiedades para ayudar a procesar traumas del pasado, reducir la ansiedad y la depresión.

¿Por qué se condena a Nacho Vidal?

De acuerdo con el tribunal que lo señala, él habría asumido la coordinación del ritual, atribuyéndose un “conocimiento especial sobre este tipo de ceremonias”.

De hecho, se dice que él determinó la dosis que el fallecido inhaló a través de una pipa de cristal, a pesar de que es evidente su “carencia de conocimientos médicos”, que quedó de manifiesto cuando la víctima se desmayó y, a pesar de eso, “todos continuaron con la ceremonia durante varios minutos”.