La posibilidad de que la final entre América y Santa Fe se juegue con un reducido número de aficionados en el Pascual Guerrero, se diluyó por completo.
El alcalde de Cali, Jorge Iván Ospina, fue claro en manifestar que era imposible aceptar esa petición que ya le había hecho la Dimayor.
Ante los medios de comunicación, el mandatario caleño dijo que "lo primero que debo decir es un no a la solicitud de la Dimayor para tener aficionados en el Pascual. Debemos extremar las medidas para evitar la propagación del coronavirus".
Ospina también en sus redes sociales mantuvo su postura, reconociendo que era hincha del América, pero que se abstenía de dar la autorización por las dificultades presentadas por la pandemia.
En Bogotá lo más probable es que también se impida la presencia de hinchas en el estadio El Campín para el duelo decisivo del 27 de diciembre.