Los disturbios presentados en las afueras del estadio Romelio Martínez de Barranquilla, ciudad donde se realiza el cotejo entre América de Cali y Atlético Mineiro por la Copa Libertadores, ha generado que el juego se suspenda en varias ocasiones por culpa de los gases lacrimógenos que ha afectado el desarrollo normal del cotejo.
Tal como sucedió en la noche del miércoles en el juego entre Junior y River Plate en el mismo escenario, los enfrentamientos entre la Policía y manifestantes en Barranquilla, llevaron a que la fuerza pública interviniera en ese sector de la capital atlanticense para disolver las protestas.
Dos tanquetas del Esmad dispersan a los manifestantes de la zona. Habitantes del sector de la calle 72 reportan afectaciones por los gases.
Sobre el minuto 38 , el árbitro central toma la decisión de detener las acciones y ambos planteles se van a sus camerinos a la espera de que se pueda continuar el juego.
Luego de ocho minutos de para, el duelo entre colombianos y brasileños se reanudó en la grama del Romelio Martínez.
La fecha pasada cinco juegos de torneos continentales tuvieron que ser trasladados fuera de Colombia por la situación de orden público que vive el país hace dos semanas. Los equipos volvieron a su país esta jornada, pero los disturbios alteraron el desarrollo de los partidos disputados en Pereira y Barranquilla el miércoles y jueves.
El estallido social que vive Colombia deja al menos 42 muertos y planea sobre la Copa América 2021, que se jugará en este país y en Argentina en 30 días.