Las cejas son una de las zonas más importantes del rostro, ya que estas juegan un rol fundamental en cuanto a la definición y armonía del mismo, pues enmarcan los ojos y pueden cambiar por completo la expresión facial.
Por esta razón, resulta primordial aprender a maquillarlas, pero de modo en que estas luzcan naturales; debido a que, si quedan muy remarcadas, alterarán las facciones.
El primer paso para unas cejas naturales es identificar la forma que más se adapta a su rostro. Se recomienda usar un lápiz de cejas para alinear el inicio, el arco y el final de la ceja.
Teniendo eso en cuenta, utilice el lápiz para rellenar las áreas dispersas con trazos ligeros y cortos, imitando la dirección natural del crecimiento del vello. Comience en el centro de la ceja y trabaje hacia afuera, usando menos presión a medida que se acerca al inicio de la ceja para un buen degradado.
Aplique un polvo de cejas para suavizar y difuminar el color; esto ayuda a evitar líneas duras y crea un efecto más natural. Finalmente, utilice un gel de cejas para peinar y fijar los vellos en su lugar. Esto no solo mantiene la forma durante todo el día, sino que también agrega un acabado pulido y ordenado.
Cabe destacar que para lograr un aspecto natural, es fundamental elegir los productos correctos. Una de las recomendaciones de los expertos es optar por un lápiz de cejas de tono similar al color natural de sus cejas. Los lápices son ideales para crear trazos finos que imitan los vellos naturales.
Los polvos de cejas, por su parte, son excelentes para rellenar áreas más grandes y dar un aspecto más suave. Y el gel, ya sea transparente o de algún color, ayuda a fijar las cejas en su lugar y añadir textura.
Tip extra: Después de aplicar el maquillaje, utilice un corrector o un iluminador debajo del arco de la ceja para limpiar cualquier error y resaltar la forma. Difumine bien el producto para que no queden líneas visibles.