El sol, aunque brinda vitamina D, también puede dañar la piel. La exposición prolongada puede causar daños como enrojecimiento, deshidratación y quemaduras. Para aliviar estos síntomas y promover la regeneración cutánea, una mascarilla elaborada con cuatro ingredientes naturales pueden ser la solución.

  • Aloe vera: Conocido por sus propiedades calmantes y regeneradoras, el aloe vera ayuda a reducir la inflamación y a hidratar en profundidad.
  • Miel: Gracias a sus propiedades antibacterianas y humectantes, la miel calma la piel irritada y acelera la cicatrización.
  • Avena: Actúa como un emoliente, suavizando la piel y aliviando la picazón. Además, sus antioxidantes protegen la piel del daño causado por los radicales libres.
  • Yogur natural: El ácido láctico del yogur exfolia suavemente la piel, eliminando las células muertas y renovando la epidermis. Sus probióticos, por su parte, contribuyen a mejorar la salud de la microbiota cutánea.

Preparación y aplicación

  • Mezclar: Se mezclan partes iguales de aloe vera, miel, avena en polvo y yogur natural hasta obtener una pasta homogénea.
  • Aplicar: Se aplica la pasta sobre el rostro limpio y seco, evitando el contorno de los ojos.
  • Retirar: Se deja actuar durante 15-20 minutos y luego se enjuaga con abundante agua tibia.
La mascarilla de avena y miel es beneficiosa para reparar la piel maltratada por el sol. | Foto: Getty Images

Beneficios y consejos

Esta mascarilla ofrece múltiples beneficios para la piel dañada por el sol:

  • Calma la irritación.
  • Hidrata en profundidad.
  • Suaviza y regenera.
  • Protege contra los radicales libres.

Para potenciar los resultados, se recomienda aplicar esta mascarilla 2-3 veces por semana durante las primeras semanas después de la exposición solar. Además, es importante complementar el tratamiento con una crema hidratante adecuada y utilizar protector solar diariamente. En caso de que las quemaduras generen síntomas persistentes, se aconseja acudir con un dermatólogo.

Para un tratamiento más personalizado, se recomienda consultar con un dermatólogo. | Foto: Getty Images/Image Source

*Este artículo fue creado con ayuda de una inteligencia artificial que utiliza machine learning para producir texto similar al humano, y curado por un periodista especializado de El País.