Por David Matos, periodista de El País
Los grandes proyectos inician casi siempre con un sueño. Andrés Guerra es un soñador de 35 años que materializa con tenacidad y esfuerzo una mejor calidad de vida para los jóvenes del corregimiento de Montebello, a través del ‘breaking’, danza acrobática que forma parte de la cultura del hip hop.
Un sueño
Nacidos en la ciudad de Valencia, estado Carabobo de Venezuela, Andrés y sus hermanos, Ilustre, de dos años, y Jonathan, de cinco; fueron apodados ‘Los lechitas’, luego que a sus 13 años, el hermano mayor ayudara en la crianza de sus hermanos con tetero en mano cuando más de treinta jóvenes se reunían para disfrutar y aprender del arte del breaking en las calles de la ciudad de Valencia.
Los hermanos comenzaron a entrenar con varios vecinos en el parque Recreacional del Sur de Valencia para aprender de un atleta apodado ‘El Ruso’, profesional quien les enseñó el arte como una oportunidad para mantener un estilo de vida saludable. “Decidimos ir a otras ciudades y comenzamos a participar en competencias regionales y nacionales. “Risk Boys” se convirtió en la tercera generación de breaking en Venezuela, de jóvenes entre 14 y 15 años, que logró ganar su primer campeonato nacional en 2007″, dijo Guerra.
El trabajo entre comunidades y el reclutamiento entre jóvenes bailarines de danza urbana reanimó las competencias nacionales e internacionales de ´Breaking’. La agrupación, conformada por los bailarines y atletas Hugo Romero, Jesús Quintero y los hermanos Guerra, Andrés, Infinito y Jonathán comenzaron a viajar en 2011 a países como Colombia y Perú, donde fueron campeones.
“Entramos cárceles, discotecas LGBTIQ+; fuimos a todos los lugares y nosotros no rechazamos a quienes desearan formar parte del grupo. Comenzamos a formar artistas urbanos, como B-boy Alvin (Vinotinto), quien llegó a la edad de cinco años a trabajar con Risk Boys, y ahora es reconocido mundialmente”, recordó.
La emergencia humanitaria compleja en Venezuela durante 2017 obligó a que los integrantes del grupo migraran hacia varios países de Latinoamérica y Europa. Andrés Guerra viajó a Bucaramanga en compañía de los bailarines Rigo, Enzo Parra y su hermano Ilustre, quienes debieron pausar su sueño para garantizar su propio sustento.
A finales de 2018, Andrés Guerra, director de la agrupación, pudo traer a su madre, su esposa y su hija, y se establecieron en Santa Marta, donde Andrés pudo trabajar como cocinero profesional, emprender con un hostal que duró casi un año en la ciudad y finalmente practicar breaking en la bahía con varios bailarines venezolanos del estado Coro, Falcón.
Trabajo social en Cali
En 2019, Andrés Guerra recibió la invitación de varios compañeros de ‘Risk Boys’ para viajar hacia Cali y dirigir la agrupación que comenzaba a ganar reconocimiento en los espacios públicos de la ciudad, como el Bulevar del Río y los alrededores del Museo La Tertulia. “Conformamos nuevamente la agrupación y nos establecimos en Montebello, donde pudimos rescatar a varios compañeros de las drogas. Nosotros tenemos la convicción de que el arte y la fe pueden cambiar para bien la vida de las personas”, recordó.
En compañía de los jóvenes Esteven Zuluaga, Jefferson Ordoñez, Jhonny Penagos y Alejandra Anarcona, el director de ‘Risk Boys’ constituyeron parte del movimiento Montañarte con el que han construido una escuela de baile con 60 jóvenes que ensayan en la Casa Cultural de Montebello, la Biblioteca Pública Rumenigue Perea Padilla y la vereda de Montecito.
A partir de la labor social en Cali se constituyó la Fundación Risk Boys sin Fronteras arte, cultura, deporte y temas ambientales. Se beneficia a 20 familias venezolanas con alimentos.
En 2023, esta agrupación formó parte del programa Conectado Caminos por los Derechos, una iniciativa de USAID, en la que resultaron ganadores con el proyecto ‘Breaking sin fronteras’, un proyecto experimental diseñado para enseñar cómo proteger los derechos humanos y hacer frente a la violencia de género a través del breaking.
“Aunque tenemos una presencia fuerte en los sectores rurales de Montebello, nuestra escuela de danza es la que representa en estos momentos a Cali. Este año estamos enfocados en que nuestra labor abarque más comunidades de la ciudad, a partir del apoyo, no solo de colombianos y venezolanos, sino también personas argentinas, chilenas y ecuatorianas, que vienen a nosotros para integrarse cultural y cívicamente”, dijo Andrés Guerra.
Los hermanos del director de esta agrupación son reconocidos internacionalmente. Ilustre Rock ha sido campeón internacional en el Red BC One, mientras que Jonathan, mejor conocido como Chill Rock, está rompiendo barreras del breaking en Chile.
Esta agrupación también mejora la calidad de vida de los jóvenes colombianos que, a través del baile y la integración, lograron pagar sus estudios y ayudar a sus padres. En 2024, ‘Risk Boys’ se posicionará como Club Deportivo para los juegos olímpicos de París 2024, y comenzará la formación de los próximos representantes colombianos del breaking con alcance global.