El ritmo de joropo y la música llanera se escuchan desde Venezuela hasta Cali. Esta es la historia de un docente colombo venezolano al que la música le dio la posibilidad de tener una mejor calidad de vida.
Jerson Daniel Contreras es procedente de Venezuela y toda su vida ha tenido un gran amor: el arpa, pues desde pequeño estuvo inmerso en cursos de música que se dictaban en academias e institutos para aprender a tocar instrumentos típicos de la región llanera como son el bajo eléctrico, el cuatro y las maracas.
Además de su talento, Jerson también estudió pedagogía de educación en la Universidad Pedagógica Experimental Libertador (UPEL) y estuvo vinculado al Ministerio de Educación de Venezuela durante 11 años como docente de cultura en escuelas primarias. Sin embargo, hace siete años llegó a la ciudad de Cali en busca de mejores oportunidades.
“Yo migré en el año 2017 por la difícil situación que vivía el país, llegué directo a esta ciudad porque tenía un amigo aquí y me dijo que estaban necesitando un músico que tocara el arpa, ya que casi no había gente que tocara este instrumento. Entonces, yo me vine y él me ofreció tocar con los mariachis, ese fue mi primer trabajo”, recordó Jerson.
Contreras es oriundo de Venezuela, pero su abuela y su madre tienen nacionalidad colombiana, por eso es un ciudadano colombo venezolano. Este hecho hizo que su adaptación en Cali fuera más fácil, pues ahora cuenta con cédula de ciudadanía.
En su primer trabajo como parte de un grupo de mariachis duró aproximadamente ocho meses, pues a pesar de que esto le brindaba estabilidad, sentía que no era lo suyo, pues anteriormente se desempeñaba en la docencia y su sueño era independizarse para montar un grupo de música llanera.
Un par de meses después, Jerson se enteró, por medio de un amigo, que la Universidad Icesi requería un docente de música especializado en el arpa e hizo inmediatamente el procedimiento estipulado y logró ingresar a la Institución.
“Ser profesor es un estilo de vida, porque saber transmitir el conocimiento es un verdadero reto y ver a los estudiantes aplicar lo que se les explica a través de la música es algo que me llena de orgullo”, expresó Contreras.
Actualmente, Jerson lleva cinco años siendo docente de la materia ‘Laboratorio Instrumental Colombiano’, de la Universidad Icesi. Este curso está dirigido a los estudiantes del programa de música con énfasis en producción musical.
“Los estudiantes que están cursando producción musical ven en quinto semestre laboratorio instrumental Latinoamericano donde conocen música de diferentes países y cuando pasan a sexto semestre ven Laboratorio Instrumental Colombiano donde están las regiones de Colombia. La Universidad Icesi hace que ellos se encuentren con estos ritmos del país y puedan conocer la historia musical de Colombia”, aseguró Contreras.
Estos cursos se dan en el Centro de Producción Creativa que tiene la Universidad Icesi. Este espacio cuenta con tecnología de punta, con un diseño acústico, con sistemas de audio análogo y digital de alta calidad que dan como resultado espacios académicos y profesionales ideales para los procesos de producción y práctica musical.
En este proceso de migración y adaptación a otra ciudad, Jerson Contreras destacó la música como el medio que le abrió las puertas para continuar con su vida, asimismo, resaltó el valor de la amistad y agradeció la oportunidad de haberse podido vincular a una Universidad que le ha brindado aprendizajes y estabilidad.
“Por el hecho y la bendición de haber llegado por un amigo que me consiguió trabajo rápidamente he conocido a personas maravillosas que me han tendido la mano, ejemplo de ello fue una doctora que me apoyó en mi vida personal y profesional, pues ella junto con otros colegas, hicieron un programa musical donde yo dicté un seminario de Arpa a los niños migrantes venezolanos y de bajos recursos que hay en la ciudad. Junto con otros músicos llevamos este programa por cuatro meses y nos presentamos en el Teatro Jorge Isaacs, hasta que llegó la pandemia del Covid-19 y el proyecto se frenó, sin embargo, espero que pueda volverse a poner en marcha”, sostuvo.
Un sueño cumplido
Contreras logró crear ‘Llano y Melodía’ una agrupación que busca mostrar, visibilizar y posicionar la música y el folclor llanero en la ciudad de Cali. Actualmente, el grupo tradicional cuenta con una cantante y cuatro integrantes más que tocan el arpa, el cuatro, el bajo y las maracas.
“Nosotros usualmente ensayamos cada semana en mi casa, pero por ejemplo, ahora estamos trabajando fuertemente para volvernos a presentar al Festival Hatoviejo Cotrafa de música Andina y Llanera Colombiana en bello Antioquia, Medellín”, dijo.
Contreras explicó que hace dos años, el grupo Llano y Melodía ganó un premio en la categoría de la mejor Obra Inédita Vocal con el tema ‘Soy viajero de otras tierras de Clarena Vergara’.
Además de eso, el grupo se presenta en eventos privados los fines de semana cuando son contratados. La Agrupación trabaja por serenata y por hora.
“Yo siempre he querido que el grupo sea más reconocido y sigo trabajando en eso. La idea es seguir creciendo y posicionar la música llanera en la ciudad. Esta cultura no es solo de Venezuela, sino también de Colombia, la compartimos y la migración ha hecho que en muchas partes del mundo ahora se escuche el Joropo”, precisó.