Desde Necoclí (Antioquia), la Defensoría del Pueblo le solicitó al Gobierno Nacional ‘avanzar’ en la implementación de una “política integral migratoria” que encare el tránsito irregular de migrantes en el Tapón del Darién.
Entre el primero de enero y el 15 de mayo de 2024, 175.851 personas cruzaron la selva fronteriza entre Colombia y Panamá, de acuerdo con cifras de Migración Colombia. Entre ellas, 118.397 eran venezolanas y 13.814 provenían de Haití.
”La Cancillería debe constituir de manera urgente el Sistema Nacional de Migraciones como una instancia armónica de instituciones y organizaciones de la sociedad civil, desde la cual se promueva el goce efectivo de los derechos de la población migrante”, afirmó el defensor del pueblo, Carlos Camargo.
El aumento del flujo migratorio ha impactado en la economía local, lo que ha incrementado los precios de la canasta familiar o de los transportes, entre otros bienes y servicios cuyo acceso se ha visto “limitado”, sobre todo en la población en tránsito.
La población ‘de extrema vulnerabilidad’, apuntó la Defensoría, enfrenta barreras que terminan prolongando su movilidad en los municipios del eje bananero, especialmente en Apartadó, Turbo y Necoclí y se ven expuestas a afectaciones físicas y psicosociales.
Además, dijo el defensor Camargo, quienes migran irregularmente por el Darién habitan en la calle, instrumentalizan a niñas y niños para la mendicidad, acuden al “sexo por supervivencia” y reciben “xenofobia, aporofobia y barreras de acceso a derechos”.
”La Defensoría del Pueblo, a través de sus Regionales, continuará haciéndole un seguimiento y acompañamiento a la situación humanitaria de las miles de personas que continúan en tránsito irregular por esa zona limítrofe con Panamá”, aseguró la entidad.
*Con información de Colprensa.