En un acto celebrado en la mañana de este martes, al que asistieron los comerciantes de la galería Santa Elena y diferentes funcionarios de la Administración Municipal, el alcalde Jorge Iván Ospina suscribió el pacto con los empresarios de esta central de abasto a través del cual se adelantarán acciones para afrontar la pandemia del coronavirus.
"Primero, va a haber un cordón sanitario, seguridad alimentaria para los trabajadores formales e informales del sector, un proceso de tamizaje para poder identificar donde se encuentran los contagiados, un acercamiento casa a casa de los vecinos de los barrios donde hay muchos problemas, habrá tecnología para hacer chequeo de control e intervención de los mismos y una construcción de cultura ciudadana del autocuidado y la prevención", detalló el Alcalde.
Desde este martes y por espacio de nueve días la galería Santa Elena no tendrá atención al público. Las autoridades instalaron alrededor de 300 vallas para controlar el acceso a este espacio.
No obstante, empresas como bodegas y fábricas procesadoras de alimentos con sede en el lugar y cuyo rango de acción es todo el departamento podrán funcionar a puerta cerrada. Se otorgaron una serie de permisos que facilitan la entrada y salida de los trabajadores. Asimismo, el comercio al por mayor de ciertos productos será admitido por parte de los organismos de control.
En el lugar se llevarán a cabo jornadas de limpieza y desinfección, al igual que tamizajes con las personas autorizadas para circular y la población asentada en las zonas aledañas a la plaza.
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"No va a ocurrir desabastecimiento, pero Santa Elena es un regulador de precios. De alguna manera, la gran apuesta es que Cavasa pueda recibir los productos que llegan desde el sur y otras galerías para que no existan dificultades en la regulación de precios", subrayó Ospina.
7000 empleos directos e indirectos genera la galería Santa Elena
El Mandatario, quien se refirió a esta intervención como un 'plan de choque' por los cerca de 80 contagios y las cinco muertes por Covid-19 que se han registrado en el sector, considera que este también es un momento para repensar la Galería y convertirla en un "gran proyecto de emprendimiento, bioseguro, donde se respete la dignidad de las personas".
"Sería muy triste que nosotros tuviésemos un problema tan grave para que después Santa Elena funcione igual. Necesitamos identificar cómo ayudarle a quienes no tienen espacio de vida aquí. Necesitamos resolver el problema de la fármacodependencia, el tema del habitante de la calle, del microtráfico, del gota a gota y de algunos irresponsables que todavía le cobran al campesino por traer sus productos a Santa Elena. Todo eso es parte de la intervención integral. Habrá que adelantar procesos de infraestructura, de espacio público, de mejores dotaciones y articulaciones para que pueda funcionar bien. Es una apuesta de por lo menos cuatro años de trabajo", señaló.