La “intervención forzosa” de la Superintendencia de Salud a Sanitas ha sembrado incertidumbre frente al futuro de los 5 millones de afiliados que esta EPS tiene en el país. Un día después del anuncio del superintendente de Salud, Luis Carlos Leal, las sedes de la entidad en Cali están operando con normalidad.
En la mañana de este miércoles, 3 de abril, El País recorrió diferentes centros de atención de esta Entidad Promotora de Salud en la capital vallecaucana y constató que, por ahora, los usuarios de la EPS están ingresando en completa normalidad a las sedes de Sanitas en la ciudad.
De acuerdo con los datos de la entidad, 437.867 usuarios se encuentran afiliados a la EPS Sanitas en el departamento del Valle del Cauca. Por esa razón, lo que pueda ocurrir con la prestación de los servicios de salud por la intervención de la Superintendencia ha causado preocupación.
El defensor del Paciente de Cali, Fernando Marinez, aseguró que buscará garantizar que a cada afiliado se le siga prestando un servicio oportuno y de acuerdo a sus necesidades.
“Estamos prestos a atender a los usuarios de esta EPS, en aras de brindar acompañamiento y que se les garanticen sus derechos, que no haya barreras en el acceso a su derecho a la salud, ese es nuestro primer objetivo”, manifestó.
“Estaremos muy atentos y pendientes de lo que pueda ocurrir en el transcurso de estos días con los pacientes, cómo sea la contingencia y lo que determinen desde el Gobierno Nacional”, añadió el funcionario.
¿Qué pasará con Sanitas?
Según la Superintendencia de Salud, esta intervención es una acción tomada en ejercicio de las funciones de la entidad. ”En ejercicio de sus funciones de inspección, vigilancia y control, acaba de tomar posesión de los bienes, saberes y negocios de la EPS Sanitas, y ordena la medida de intervención forzosa administrativa”, indicó el funcionario del Gobierno.
La intervención, dijo Leal, tendrá un período de un año e implica que el propio Gobierno será el encargado de administrar distintas funciones de la EPS, que cuenta con más de 5,7 millones de usuarios, lo que la convierte en una de las más grandes en Colombia.
Según el Superintendente, la decisión se basó en “el incumplimiento de los requisitos financieros de habilitación y otros factores analizados en el Comité de Medidas Especiales desarrollado en el interior de la Superintendencia”.
Aunque no entregó más detalles de fondo que motivaron la drástica determinación, Leal pidió a las personas afiliadas a Sanitas “que tengan la certeza de que las funciones de la EPS van a continuar”, por lo que no deben acudir a ningún trámite burocrático.
”Esta intervención se toma con el ánimo de proteger los intereses y la salud de la población, así que este mensaje es uno de tranquilidad”, puesto que “no se está acabando la EPS”, precisó el superintendente, quien enfatizó en que funcionarios y usuarios pueden continuar con sus labores en normalidad.
El superintendente de Salud no dio el nombre del interventor. Sin embargo, trascendió que se trata de Duver Dicson Vargas Rojas, a quien la superintendencia de Fabio Aristizábal encargó en 2022 intervenir el hospital Rosario Pumarejo de López en Valledupar (Cesar).
Vargas Rojas es conocido por su gestión en el Rosario, pues en julio de 2023 alertó que en el centro médico agentes externos se estaban presentando como tramitadores para jugar a su favor en diversos requerimientos adelantados frente al hospital.