La Gobernación del Valle del Cauca se pronunció respecto al cierre de los servicios materno infantil y de pediatría de la Clínica Palmira y advirtió las probabilidades de que esto impacte la capacidad de respuesta en Cali.
“Esta es una noticia que llevábamos esperando ya hace algunos días porque la situación financiera de las instituciones no lo permite” afirmó María Cristina Lesmes, secretaria de Salud del Valle.
La jefa de la dependencia departamental, explicó que estos servicios son altamente costosos ya que implican la presencia de un personal especializado 24 horas al día, el cual “vale una plata muy importante y requiere unos insumos que son costosos y necesita el pago oportuno de los mismos”.
“La Clínica Palmira ha hecho todos los esfuerzos por mantenerse abierta, pero llega un momento en que definitivamente no se puede pues le deben unos $40.000 millones, que si le pagan podría reanudar los servicios”, agregó.
Este centro hospitalario se ha visto gravemente afectado por el cierre paulatino de varios de sus servicios, entre los que se encuentran consulta externa, quirófanos y la Unidad de Cuidados Intensivos Neonatal y la Unidad de Cuidados Intensivos de Alto Riesgo Obstétrico.
A esta crisis, se le suma el hecho de que estas unidades atendían a Palmira y a pacientes de otros municipios como Cerrito, Florida, Pradera, Candelaria, Costa Rica y Corinto, en el norte del Cauca, lo que agrava aún más la atención en toda la región.
Lesmes resaltó que en Cali, los servicios asistenciales ya se encuentran saturados, implicando que, como consecuencia, se sentirá el impacto de esta baja en el distrito.
“Esto nos complica la vida porque significa que en Palmira ya no van a atender un número importante de mujeres que vendrán necesariamente a Cali a demandar servicios que ya están colapsados y de centros médicos que también están viviendo una situación financiera muy difícil” señaló la secretaria departamental.
También recordó que, frente a esta problemática, la gobernadora, Dilian Francisca Toro, ya estaría adelantando gestiones para lograr acuerdos con las EPS con el propósito de permitir el pago completo de los servicios del año 2024 y el replanteamiento de los pagos de los años anteriores.
“Esto implica un ejercicio de filigrana entre la IPS, organizándolo nosotros para una propuesta de la EPS y el compromiso de ellas de lograr el giro directo de forma completa de los servicios durante el año 2025”, explicó la funcionaria.
Cabe recordar que la deuda de las EPS con la red de salud pública y privada del departamento alcanza los $3,5 billones.