Un estudio dado a conocer en el mes de febrero por la Red de Ciudades Cómo Vamos, sobre el Índice de Ciudades Universitarias (ICU) reveló que para el 2015 Cali mejoró sus resultados respecto al 2014, alcanzando el lugar más alto en los últimos cuatro años.
El ICU permite reconocer la competitividad de las ciudades desde el potencial para desarrollar conocimiento y competencias laborales, evaluando cinco aspectos: el ambiente universitario, la calidad de la educación superior, el costo de la vida, la empleabilidad de los egresados y la calidad de vida de los centros urbanos.
La medición, según explicó el rector de la Universidad Javeriana de Cali, Luis Felipe Gómez Restrepo, se elaboró usando información entre los años 2012 a 2015 y siguiendo los procedimientos del manual de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo (OCDE), cuya misión es promover políticas que mejoren el bienestar económico y social de las personas alrededor del mundo.
Gómez Restrepo señaló que si bien la capital vallecaucana mejoró notablemente sus resultados con respecto a años anteriores, al hacer el análisis del conjunto de la información del ICU se puede decir que “en Cali aún tenemos grandes desafíos para la mejora y consolidación de las condiciones que ofrecemos a los estudiantes universitarios del país, que escogen o quieren inclinarse por nuestra oferta universitaria”.
Agregó que para la consolidación de Cali como Ciudad Universitaria es fundamental el apoyo de la Alcaldía y su articulación con las universidades, especialmente con las acreditadas en alta calidad, para que a través de un plan ordenado y de largo plazo, se proporcionen las condiciones tendientes a convertir a Cali en un polo educativo, con gran fuerza de atracción.
“En el plan Cali Progresa Contigo, se habla de la ‘fortaleza estructurante de su sector académico’; pues bien, hay que articularlo cada día más con las políticas de la ciudad”, reiteró el rector de la Javeriana.
Pero, reiteró, que es de vital importancia que las universidades logren visibilizar cuáles son sus fortalezas y particularidades de la oferta educativa, aunque ya las acreditaciones nacionales e internacionales son claras señales de ellas.
De otro lado, la Vicerrectora Académica de la Universidad del Valle, Liliana Arias Castilo, coincidió con Gómez Restrepo en que la importancia de esta medición está en cómo lograr que los centros de educación superior retengan o hagan más atractivo cada una de las ciudades para que se conviertan en ciudades universitarias.
“La pregunta es cómo podemos hacer esta oferta teniendo que dentro de los parámetros que se incluyen hay aspectos que no dependen de la institución educativa, ni de los programas que ofrecen, sino de la sociedad y de la ciudad en general”, indicó Arias.
Agregó que el papel de las universidades no solamente debe ser formar profesionales sino también ciudadanos que cumplan un rol dentro de sus ciudades, a la vez que ofrecer programas de alta calidad.
Actualmente, reveló, las universidades acreditadas de la capital vallecaucana diseñaron el programa de movilidad estudiantil, Move, que está orientado a aunar esfuerzos para que los estudiantes en vez de irse a otras ciudades del orden nacional o a otros países, se queden en Cali.
“Pero también la idea es que nosotros nos volvamos muy atractivos para que esas personas de Centroamérica, Suramérica y de otras ciudades de Colombia vengan a estudiar a Cali, pues esta es una urbe que tiene aspectos muy positivos para este tema de ciudad universitaria”, acotó la Vicerrectora Académica de Univalle.
En ese sentido, destacó que la adquisición de vivienda en Cali se sigue manejando con parámetros de menor costo y la calidad de vida en general es buena en la medida en que la gente es amable, hay alegría y buen ambiente para estudiar.
No obstante, reconoció que aún existen grandes retos como es el la seguridad y eso puede bajar un poco el atractivo para que estudiantes de otras ciudades o países vengan a Cali.
Manifestó que las universidades caleñas tienen una oferta bastante buena y competitiva en los diferentes campos disciplinarios, con los centros de educación superior que manejan el programa de movilidad para estudiantes.
Ahora, reconoció la docente, el otro gran reto es lograr que los egresados de las distintas universidades caleñas puedan emplearse.
“En este momento tenemos muchas ventajas y es que somos universidades acreditadas que estamos mirando en la misma dirección, con una visión de futuro. En la medida que hagamos sinergia nos permitirá trabajar con entidades como la Cámara de Comercio, turismo, Alcaldía, para mejorar aspectos de seguridad, movilidad, salud y transporte que no se pueden hacer por iniciativa de las universidades”, puntualizó.
Calidad y Ocde
¿Por qué es tan importante este indicador para Colombia acceder a la OCDE? Para Liliana Arias, esta organización se encarga de manejar los indicadores de desarrollo económico y bienestar social que son parámetros para los países desarrollados. En ese orden de ideas, anotó, que si Colombia está en el camino de dejar de ser un país en vía de desarrollo, tiene que acogerse a estos indicadores.
“La mejor manera de generar desarrollo y progreso en un país es mejorando el nivel educativo de sus ciudadanos. Debemos mejorar las oportunidades a los estudiantes para que su nivel de educación no se quede en el bachillerato o el pregrado, solo así estaremos conformando un mejor país. Ese es el compromiso de la universidad pública, no solo ampliar la cobertura, sino que sea una cobertura con calidad”, enfatizó.
Por su parte, el presbítero Raúl Jordán Balanta, rector de la Universidad Pontificia Bolivariana, seccional Palmira, sostuvo que el ICU permite a las universidades tener una mirada holística de la pertinencia que está generando en los programas académicos que ofrecen y el nivel de pertinencia que le significa a la ciudad y consecuentemente a la región.
“El mejoramiento de los últimos años permite validar la sinergia entre la disponibilidad de profesionales competentes y presencia de empleos de alto nivel, lo cual mejora significativamente la calidad de vida de las ciudades y el aporte al PIB Nacional”, sostuvo.
Añadió que se debe hacer un análisis de las realidades del país para trabajar sobre esos aspectos en los posgrados. “Debemos trabajar también en temas de investigación, ciencia, tecnología e innovación que son ahora elementos fundamentales en el campo social, económico y ambiental”, afirmó.
En cuanto en cómo convertir a Palmira y a Cali en un polo educativo, opinó que estas dos ciudades son privilegiadas y muy atractivas en lo que a turismo se refiere debido a la belleza de sus paisajes, su clima y la gente que las habita.
Sin embargo, dijo que se debe mejorar el tema de seguridad, pero teniendo como base la educación, al asegurar que lo que se debe incrementar es la calidad educativa no tanto la fuerza pública.
Acreditación de alta calidad:
Las universidades que más ofrecen programas de estudio con acreditaciones de alta calidad en Cali, son: Javeriana, del Valle, Icesi y Autónoma de Occidente.
La Universidad Nacional de Palmira, también brinda programas de estudio de este nivel.