Como un baldado de agua fría fue recibida la decisión del Consejo de Estado de declarar infundado el recurso de anulación que interpuso Metrocali para evitar el pago de $110.041 millones a GIT Masivo, uno de los cuatro operadores del MÍO.

Un escenario que se veía venir pero que con el pasar de los días parece casi ineludible.

Desde la presidencia del Concejo de Cali, Fernando Tamayo, ha sido una de las voces más críticas frente a este tema y a otros que rodean a Metrocali, como es la llegada de la nueva flota eléctrica de buses y el papel del transporte público colectivo en la ciudad (TPC).

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En entrevista con El País, Tamayo se refiere a estos temas, pero también cuenta por qué adhirió a la campaña de Roberto Ortiz, ‘El Chontico’, a la Alcaldía de Cali y de su confrontación con uno de los líderes de su partido -Conservador-, el exgobernador del Valle del Cauca, Ubeimar Delgado.

Concejal, ¿quiénes son los responsables de que el Municipio tenga que pagar $110.041 millones a un operador del MÍO, tras perder una demanda?

Esto viene desde administraciones de hace 20 años donde se concibe un proyecto soportado sobre varias mentiras. Primero, que el MÍO sería autosostenible; dos, que era un proyecto que debería iniciar por el Distrito de Aguablanca y lo hizo por otras zonas; tres, se vende como un monopolio, lo que genera falsas expectativas. Es un proyecto que arranca cojo, mocho y ciego... Entonces varias administraciones comienzan a entregar dineros a los operadores -a través del Fondo de Estabilización del MÍO (Fesde)-, algunas veces se entrega directamente dineros a los operadores, en muchas ocasiones sin autorización del Concejo Municipal. Al principio, los operadores del MÍO eran empresas de caleños asociadas con inversionistas de otras regiones, entonces estos últimos comienzan a aumentar la inversión y los empresarios caleños empiezan a ser desplazados y queda el proyecto en pulpos económicos nacionales que se pueden dar el tiempo y el espacio para entablar demandas como la que acaba de suceder en contra de Metrocali.

Pero es que no solo ha incumplido el Municipio, sino también los operadores en el tema de servicio....

 Hay cosas que indignan, aterrizando en el presente. Unimetro es de los mayores causantes del caos que está viviendo la ciudad y nosotros los premiamos entregándoles 67 buses adicionales. Siento que Metrocali ha sido flojo, débil y postrado y que no piensa en la ciudad sino en los intereses de unos operadores privados.

Entonces, ¿cuál es la solución a este escenario?

No hay solución. Se va a presentar una tutela para evitar el pago. Como caleño esperaría que prospere, pero yo no veo que se dé. Es una plata que vamos a terminar pagando todos los caleños. Esa plata va a ir al bolsillo de un privado, un señor de Bogotá que, irónicamente, dice que se preocupa mucho por la movilidad de Cali.

Otra de las situaciones que le preocupa a usted es la licitación de los buses eléctricos...

Sí. Deje le hago la cuenta y esto que le digo está soportado. El valor de cada bus eléctrico es de $600 millones; el que oferta, en la licitación, debe poner además $36.000 millones para chatarrizar 579 buses del TPC, si distribuimos ese valor en los 109 licitados tenemos que esto nos da $330 millones por cada bus eléctrico; la infraestructura para la carga -de energía- de estos buses cuesta $100 millones, eso nos da que cada bus eléctrico va a costar $1030 millones. Esos son los buses que van a llegar ahorita. La parte ecológica es importante, pero esos lujos a estas alturas, con un sistema quebrado, con una deuda de $180.000 millones (de la demanda de GIT), tienen un agravante y es que el Fesde, que aprobó el Concejo, es específico en decir que no cubrirá nuevos operadores. Eso quiere decir que estamos haciendo un tiro al aire con 100 buses que no van mejorar la movilidad de Cali.

Uno de los reparos a estos buses es que serían poco confiables, ¿usted cree lo mismo?

Los buses eléctricos han tenido muchos problemas en otras ciudades del mundo porque su sostenimiento es muy costoso y los caleños terminaríamos pagando estos altos costos.

¿Por qué?

Porque el Concejo avaló $170.000 millones a través del Fesde que son parte de recursos propios del Municipio y también del cobro por parqueo en la vías y el cobro por congestión -para circular en pico y placa-, entre otros... esto tiene un agravante, que nada nos garantiza que estos 100 buses nos generen un cambio en la prestación del servicio, la gran reflexión que yo hago apoyando al alcalde Armitage es: Nos hemos dado una pela aprobando el Plan de Salvamento del MÍO pero voy a todos los barrios de Cali y en ninguno me dicen que el sistema ha mejorado. Las comparaciones son odiosas pero Medellín, que tiene una población similar a Cali, tiene 5000 buses, metro, tranvía, escaleras eléctricas en algunos barrios y tiene sistema de cable.

Entonces nosotros con 120 buses eléctricos esperamos generar el ‘boom’ que Cali necesita para levantar un sistema colapsado, yo creo que eso no tiene sentido.

Lo que nos debe preocupar no es la suerte de unos operadores que han demostrado que lo único que les interesa es venir a Cali a sacar la plata, sino la movilidad de los caleños.

¿Entonces usted lo que propone es un sistema intermodal de transporte?

Sí, un sistema en que el transporte público colectivo se integre al sistema para que cubra los 150.000 pasajeros que está manejando la piratería.

Pero eso es contradictorio con el plan de salvamento que firmaron ustedes, los concejales...

Lo que se planteó es que el TPC entrará como otro operador del sistema. Actualmente estamos en una bomba social, hay 600 busetas y la salida de Metrocali es enviarlas a la zona de ladera donde ya hay 500 camperos.

¿De dónde sale esa información?

Ingrid Ospina (actual presidenta de Metrocali), habla de nuevas rutas, pero esas rutas son las que manejan actualmente los camperos.

¿Cuándo pasaría esto?

Todo eso está amarrado a la licitación de los costosos buses eléctricos -para septiembre-.

Explíquenos muy bien lo de la nueva licitación...

Los 64 buses eléctricos que llegan ahora en agosto hacen parte de un proceso de Blanco y Negro que aumentó su flota tras una cesión de ETM. Pero actualmente Metrocali ya abrió un proceso de licitación para la entrada de 109 buses eléctricos -se adjudicarían en septiembre-, esto contempla un nuevo operador. Esos buses entran y se busca mejorar el aumento de pasajeros y un mejor servicio, en teoría, ellos generarían un punto de equilibrio al sistema, pero la gran realidad es que el contrato abre una posibilidad perversa y es que si no se logra esto, el Fesde terminará apoyando la entrada de estos buses y eso me preocupa porque el Fesde no habla de operadores nuevos.

¿Usted qué sabe de la infraestructura para cargar de energía esos nuevos buses que llegan ahora en agosto?

Es que no hay patios y estos buses necesitan toda una infraestructura. Yo soy un convencido que hay que apoyar el MÍO pero en su justa proporción, pero creo que hay que frenar esta carrera loca, hacer un alto en el camino y tomar decisiones correctas porque aquí está en juego la supervivencia financiera de Cali.

Ya para terminar, ¿cómo va su confrontación con el exgobernador del Valle, Ubeimar Delgado, al interior del Partido Conservador?

Con el doctor Ubeimar no hay enfrentamientos.

Pero toda la ciudad sabe que sí hay una pugna entre ustedes dos...

(Sonríe) Hemos tenido divergencias en puntos. El doctor Ubeimar es una persona que puede generar unidad al interior del partido, pero tiene alrededor personas que son como su brazo armado, por decirlo de otra forma, y no lo permiten... veo que las discusiones con el doctor Ubeimar, por la decisión de los candidatos a la Alcaldía, por el aval hacen parte del devenir de un partido que está muy fragmentado.

Explíquenos, ¿como surgió su apoyo a la candidatura de Roberto Ortiz, ‘El Chontico’, a la Alcaldía de Cali?

Hay dos aristas. La primera es que el directorio Conservador toma una decisión que inicialmente parte de una de las facciones del partido y después es apoyada por todos y se basa en un tema ideológico. La segunda, nosotros somos de derecha y el doctor Roberto Ortiz es una persona en esencia que maneja el tema de familia y autoridad. En mi caso lo que hacemos es hacer un acuerdo conceptual con él.

Tenga en cuenta

El Consejo de Estado declaró infundado el recurso de anulación que interpuso Metrocali para evitar el pago de $110.041 millones al operador GIT Masivo, como consecuencia de un tribunal de arbitramento que inició dicho concesionario en 2016 por varios incumplimientos.

Dicho concepto de la instancia nacional dejaría en firme el pago ordenado por el tribunal de arbitramento del Centro de Conciliación, Arbitraje y Amigable Composición de la Cámara de Comercio de Cali que, en noviembre del 2018, ordenó al ente gestor del MÍO cancelar al operador $84.966 millones como indemnización de perjuicios, más $25.075 millones por concepto de intereses del monto anterior.

Entre los incumplimientos por los que se obligó al ente gestor del MÍO a cancelar esos montos se cuenta no cumplir con el cronograma de entrega de las obras de infraestructura del sistema (como el patio taller definitivo que debe tener GIT) y haber permitido el paralelismo del transporte público.