El proyecto de crédito público por $ 3,5 billones para Cali, que fue radicado ante el Concejo hace ya más de un mes, continúa en su fase de estudio y análisis en la Comisión de Presupuesto de esa Corporación.
En la sesión más reciente se abordó el monto que está solicitando la Administración Distrital, así como si esta cuenta con la capacidad de pago y de endeudamiento suficiente. Al respecto, hubo posturas encontradas durante la discusión.
Por el lado de la Alcaldía, la misma aseguró que Cali acumula importantes rezagos en su desarrollo durante el presente siglo por la falta de inversión en asuntos que la pongan a la vanguardia.
“Es clave que la ciudad pueda tener recursos económicos para impulsar diferentes proyectos estratégicos que van a cambiar la ciudad y que nos permiten poner a Cali nuevamente al nivel de las grandes ciudades de Latinoamérica”, manifestó el director de Hacienda, Jhon Quinchua, ante los cabildantes.
Según el funcionario, actuando en vocería del Gobierno local, los 32 proyectos priorizados en la solicitud del crédito son urgentes para que Cali compense el atraso.
Algunos son de obra pública, como la recuperación de la malla vial y renovaciones en la Avenida Sexta, el centro de la ciudad, el sector de la Avenida Roosevelt y el barrio Alameda. Otros se enfocan en el componente ambiental, destacando el Parque Central Cañaveralejo y el corredor ambiental del jarillón del río Cauca, entre otros sociales y tecnológicos.
De igual manera, el director de Hacienda no solo aseguró que los mecanismos de transparencia están garantizados para la gestión del recurso, también indicó que, en las proyecciones realizadas, a través del recaudo de los impuestos distritales existe una maniobrabilidad que permite realizar los pagos de esta deuda, sin comprometer las finanzas.
“Hemos presentado informes en los que demostramos que tenemos la capacidad para que estos recursos puedan pagarse en un plazo de 14 años”, aseveró Quinchua.
Para esto se utilizarían los ingresos corrientes, entendidos como los tributarios, no tributarios, recursos del balance, rendimientos financieros, entre otros ítems.
Adicionalmente, frente a los intereses, el funcionario expuso que se están haciendo proyecciones, de acuerdo con el Marco Fiscal de Mediano Plazo y una lectura del mercado, con un Indicador Bancario de Referencia (IBR) + 3%.
Así, habría un monto anual promedio de la Alcaldía de unos $ 2,23 billones hasta el 2030, y otro monto promedio de unos $ 3,23 billones entre 2031 y 2038 para cumplir con su funcionamiento, recursos comprometidos y servicio a la deuda, lo que sería suficiente, según aportó Quinchua.
La preocupación en el Concejo
Los comentarios de algunos cabildantes sobre el punto financiero se resumen en dos principales preocupaciones: que Cali no tiene la capacidad de pago para un crédito de $ 3,5 billones y que todo ese monto no se llegaría a ejecutar en el cuatrienio.
El concejal Flower Rojas dijo que solo se deben considerar los ingresos tributarios, dejando los no tributarios, ingresos de capital, entre otros, por fuera del crédito. “Los bancos no prestarán en esas condiciones porque saben que los 32 proyectos no se alcanzarán a terminar, puesto que los procesos licitatorios son engorrosos y hay mucha tramitología adicional”, expresó.
Otros concejales, como María del Carmen Londoño y Roberto Ortiz, manifestaron que no están en contra de la inversión y que reconocen que la Alcaldía actual necesita del crédito para apalancar su plan de desarrollo, pero pusieron sobre la mesa la opción de un monto inferior al solicitado.
Fabio Alonso Arroyave, uno de los ponentes del proyecto de acuerdo, consideró que es necesario analizar los argumentos de parte y parte, además de aclarar todas las dudas generadas en el Concejo y la ciudadanía antes de avanzar en votaciones al respecto.
“Una vez hechos los análisis, se sopesan y se toma la decisión. Este es un Concejo responsable y sabrá hasta dónde llegar y cuánto autorizar. Ojalá dentro de tres años estemos mostrando los resultados y las obras entregadas”, sostuvo Arroyave Botero.