Debido a la crisis económica que afronta el MÍO, la Alcaldía le planteó al Concejo de la ciudad una estrategia para obtener más ingresos con destino al sistema de transporte masivo.
“Nosotros radicamos el proyecto de acuerdo con el que buscamos poder reducir el diferencial tarifario que tanto nos acosa hoy, también queremos ampliar las coberturas del sistema y tener un mejor servicio”, afirmó Jorge Iván Ospina, alcalde de la ciudad.
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La propuesta, integrada en el proyecto de acuerdo 180, contiene nueve instrumentos para obtener más recursos, incluyendo cambios en la sobretasa a la gasolina y la tasa de congestión.
Se comprará flota propia
Actualmente, al MÍO le cuesta $ 5202 transportar un usuario, mientras este le paga al sistema una tarifa de $ 2400. A esto se le conoce como el diferencial tarifario y este déficit es lo que ha hecho que Metrocali le adeude hoy más de $ 80.000 millones a los concesionarios operadores de los buses.
Por eso, se ha propuesto comprometer los recursos de la sobretasa a la gasolina hasta el 2045 y no hasta el 2029, como se tiene proyectado en la actualidad. Además, se daría el 78,6 % de este recaudo al MÍO, dinero con el que se compraría una nueva flota de buses que permita disminuir los costos de operatividad.
“Esta flota se necesita si tenemos en cuenta lo que acaba de suceder con Unimetro. El recaudo proyectado hasta 2045 es de $ 1.3 billones, que se traerían al presente para poder adquirir estos buses en el nuevo modelo del sistema que nos presentó la Alcaldía”, explicó el concejal Juan Manuel Chicango, uno de los ponentes del proyecto.
Asimismo, el 21,4 % restante del recaudo se invertiría en el mejoramiento de la malla vial de la ciudad, aumentando el presupuesto para estas obras que hasta este año cuentan con el 5 % de la sobretasa a la gasolina.
Otros instrumentos
En primer lugar está la tasa por congestión, la cual es pagada actualmente por los caleños para estar exentos de la medida de pico y placa durante un mes, seis meses y un año.
Con el proyecto se pretende dar una cuarta posibilidad a los conductores: pagar para circular por un solo día de restricción. De esta manera, los conductores que deseen estar exentos del pico y placa solo durante un día podrán cancelar $ 37.584, este valor sale de la tasa aplicada este año, la cual seguramente aumentará para el 2023.
Actualmente, el pasaje que pagan los usuarios solo cubre el 52 % de lo que cuesta transportarlos, agravando la crisis. Antes de la pandemia, este cubría el 66 %.
“Con esto se quiere flexibilizar el acceso a la tasa para que muchos más usuarios tengan la posibilidad de pagar la tarifa de acuerdo a sus necesidades, lo que permitirá que el total recaudado se pueda direccionar al MÍO para la operación del sistema”, contó Juan Manuel Chicango.
Adicionalmente, se trabaja en la posibilidad de encontrar recursos con actividades externas al componente de movilidad. La primera de ellas es aprovechar aun más el contenido publicitario, con afiches y carteles que desde hace varios años se exhiben en el sistema.
A esto se suma la posibilidad de que empresas privadas usen temporalmente los espacios en terminales y estaciones del MÍO para ubicar nuevas sucursales de sus negocios.
De forma paralela, la Alcaldía continúa trabajando en el nuevo sistema de movilidad inteligente que fue presentado al Ministerio de Transporte.
Richard Rivera, concejal y coordinador ponente del proyecto, manifestó que es muy importante poder desarrollar estas alternativas en beneficio del sistema de transporte masivo de la ciudad.
“Todos los ciudadanos, empresarios y los diferentes sectores y gremios debemos entender que lo que le hemos invertido al transporte masivo en Cali no se puede dilapidar, ni podemos dejar que se vaya al fracaso”, aseguró el concejal Rivera.
Hay más ingresos...
Adicional a las herramientas ya mencionadas, también se propuso que se implementen cobros a los conductores por utilizar garajes o parqueaderos de uso público.
De igual manera, se cobraría por permitir parquear en las vías públicas de la ciudad, en ciertos sectores que se autoricen para este fin y no impacten de forma negativa la movilidad.
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Esta última estrategia tuvo un piloto en el barrio El Peñón durante la Alcaldía de Maurice Armitage, pero ante las críticas del momento se decidió no continuar. Finalmente, intentarían poner esta herramienta en marcha en pro del sistema masivo de la ciudad.