El anuncio de un posible cobro al Monumento de Cristo Rey cuando sea abierto, antes de la COP16, generó opiniones divididas en algunos sectores de la ciudad.
Según el Departamento Administrativo de Gestión del Medio Ambiente, Dagma, la idea es que el parque sea autosostenible.
Su director, Mauricio Mira Pontón, indicó que están estudiando un cobro mínimo para la entrada al parque porque se requiere cubrir costos fijos.
“Ese cobro estaría diferenciado por la capacidad de pago. En el caso del estrato 1, 2 y 3 podríamos buscar una exoneración de un porcentaje considerable y también tendríamos un cobro diferencial para los extranjeros, como pasa en la gran mayoría de todos los parques del planeta tierra donde se cobra”, explicó Mira Pontón.
Para el funcionario, el parque tendrá unos costos fijos que se deben cubrir. “Generalmente, lo que no quieren que se cobre, pues lo paga el Estado o en este caso el Municipio, pero eso sería injusto para nuestra gente, porque estaríamos reubicando recursos que se van a destinar seguramente para otros temas muy importantes de carácter social”, reiteró.
La idea del director del Dagma es que el parque tenga esa autonomía económica y financiera que permita que el día de mañana inclusive se pueda reinvertir en temas interesantes que requiere el mismo parque.
Cabe mencionar que el parque se tiene previsto abrirlo en las próximas semanas, arrancando gradualmente con el tramo 2 y el tramo 5.
Desde el Concejo
Para el concejal Edison Lucumí, pensar en un cobro para la apertura de este proyecto sin estar terminado en su totalidad no es viable.
“No lo veo viable, más bien que sea asequible para toda la comunidad caleña, analizar un modelo de gobernanza, un modelo que tanto las personas del área rural y del área urbana se apropien del espacio, y ya con posterioridad cuando se termine todo el lugar, ahora si pensar en realizar un cobro que sea factible para toda la comunidad”, detalló.
Pero, por otro lado, para el concejal Edison Giraldo, la idea de un cobro no es descabellada, ya que lo primero que se debe entender es la sostenibilidad que tienen los parques y espacios en Cali.
“En el bulevar del Río y el del Oriente, tienen una problemática y es que quedaron bonitos, pero no tienen sostenibilidad, por lo tanto los espacios se llenan de vendedores informales, de basuras, no tienen un control en temas de seguridad porque no hay un presupuesto para el mantenimiento”, indicó.
Y agregó que “en este caso el cobro sería una tarifa de muy bajo costo, que sea algo significativo, pero también que podamos tener exenciones para los estudiantes, para los universitarios, que les permita tener acceso a estos parques que es para el uso público. Este sitio también exige seguridad, limpieza, mantenimiento de jardines y de arbustos”, sostuvo Giraldo.
Para el cabildante, el cobro o el crear una fuente de ingreso de destino directo desde la administración, sería una opción que habría que discutir.
Dos maneras diferentes de ver el posible cobro
Para la ciudadana Ingrid Selene Calvo, si el cobro se realiza para garantizar el mantenimiento y la seguridad, sí está de acuerdo.
“Si garantizan que no entrará gente hacer daños, a consumir alucinógenos, y que será para garantizar la paz y el cuidado del lugar, entonces sí estaría dispuesta a pagar”, contó.
Versión contraria a la de Gloria Arango, quien recordó que desde que era una niña visitaba el lugar, y que nunca su familia tuvo que pagar para ingresar.
“Lo máximo que se pagaba hace unos pocos años atrás era el parqueadero, pero de resto nada. No es justo que le dañen la ilusión a tantas personas que lo que tienen en los bolsillos prefieren invertirlo en un transporte que los acerque al lugar e ir a conocer. No quiero imaginarme si eso mismo lo llegan hacer en el río Pance, donde tantas familias acuden para disfrutar”, enfatizó.
Alejandro López, guía de turismo profesional voluntario que compartió con miles de turistas nacionales y extranjeros durante más de 10 años en Cristo Rey, señaló que el cobro le parece el colmo.
“Cristo Rey fue regalado por los Jesuitas hace más de 70 años. Luego de eso ese lugar se vuelve un espacio público que es para hacer el Viacrucis, para que la gente vaya a ver la vista, para refrescarse, para rezar, porque es Jesucristo y es un símbolo de paz, es un espacio público. Todos pagamos impuestos y con ellos se puede tener bonito el lugar, pintarlo, no dejarlo caer, la seguridad, como un parque, como está el bulevar del Río”, recalcó.
A la vez que manifestó que el proyecto del Cristo Rey fue realizado con el “presupuesto del bolsillo de todos y ¿ahora van a querer cobrar por la entrada?, es el colmo del atrevimiento”.
López cuenta que en sus 10 años de labores como guía en el monumento, vio gente que era supremamente pobre, a la que llegar a Cristo Rey se convertía en todo un desafío.
“Hay gente que tiene cuatro hijos, que anda con la suegra, con la abuela encima, gente pobre que solo va para querer conocer ese mirador, y no es justo que le quieran cobrar. Ahora el problema es que después de que cobren la entrada, ya una gaseosa no va a costar $3000, sino tres veces más”, puntualizó.