Los departamentos más biodiversos de Colombia enfrentan un gran reto: impulsar su desarrollo económico y sostenible, y para lograrlo, los gobernadores del Valle del Cauca, Dilian Francisca Toro; del Chocó, Nubia Carolina Córdoba, y de Nariño, Luis Alfonso Escobar, iniciaron un arduo trabajo a través de sus políticas públicas.
La gobernadora del Valle, Dilian Francisca Toro, mencionó que los puntos más importantes que fueron incluidos en el Plan de Desarrollo para proteger la biodiversidad y conservarla fueron la gobernanza ambiental, las áreas protegidas y aquellas que se tiene previsto recuperar.
Como ejemplo señaló que en el Valle del Cauca, desde hace 8 años, se han sembrado cerca de 20 millones de árboles, se ha mantenido la capacidad de los embalses como el Sara Brut y hoy se cuenta con 648 mil área protegidas.
“Nosotros tenemos el primer puesto en competitividad y sostenibilidad ambiental, precisamente por esta reforestación, y además tenemos pagos por servicios ambientales que son fundamentales para proteger el medio ambiente, conservar la biodiversidad y generar desarrollo sostenible en las comunidades”, detalló Toro.
Aprovechamiento de los territorios
Para la gobernadora del Chocó, Nubia Carolina Córdoba, este territorio tiene la posibilidad de aprovechar las condiciones de megadiversidad en favor del aprovechamiento de los territorios y las comunidades.
Por ello, aseguró que el departamento del Chocó en particular tiene características únicas al interior del país: posee dos costas, dos bosques, una selva, ecosistema de manglar, ecosistema de río y ecosistema de producción que está dentro de los procesos.
“Lo que nosotros hemos planteado en el Plan de Desarrollo es justamente que los servicios ecosistémicos no son solo una ventana de conservación del territorio, sino un presupuesto de desarrollo y progreso”, recalcó.
Además, dentro de dicho plan también decidieron aprovechar las ventajas ecosistémicas para convertirlas en servicios que puedan ser monetizables por las comunidades.
Hoy, en esta región le apuestan a la conservación, a la captación de dióxido de carbono y a la venta de bonos de carbono “que pudiéramos estar haciendo nosotros”, señaló la mandataria de ese departamento.
Para el Chocó, lo importante ha sido plantear que el criterio de sostenibilidad y de activo territorial hacen parte del desarrollo económico que es transversal al Plan de Desarrollo creado.
Cinco mundos
Luis Alfonso Escobar, gobernador de Nariño, señaló que su Plan de Desarrollo está alineado con lo que el departamento tiene para ofrecer en sus “cinco mundos”: el océano, el cordón del litoral, la zona andina, la conexión vial y el mundo amazónico.
En todos ellos, el departamento busca resolver temas de conservación climática, de biodiversidad y de contaminación.
“Está el océano que compartimos los cuatro departamentos, también el cordón del litoral donde hay más de 640 mil hectáreas de los bosques de manglar mejor conservados del país. Otro mundo es nuestra zona andina, que básicamente en el Nudo de los Pastos y representa la zona más estrecha para cruzar la Orinoquía hacia el mar del Pacífico”, sostuvo.
A lo que adhirió también la conexión vial con el interior del país a través de Popayán – Pasto – Rumichaca, pero también de manera lateral San Francisco – Mocoa, ruta que permite que Bogotá solo quede a 13 horas del departamento.
“Y el otro mundo que no lo tienen los otros departamentos es el amazónico, el cual nace en La Cocha y representa un valor de la conservación de la biodiversidad muy importante. Estos elementos aparecen en el Plan de Desarrollo, además de los proyectos relacionados con la conservación de la naturaleza a través de bonos verdes, al igual que los mercados verdes”, enfatizó el gobernador.
Un freno a la ilegalidad
Un tema que le compete sobre todo a los departamentos del Chocó y Nariño es el de la explotación de los recursos naturales con fines ilegales.
Para arrebatarle ese patrimonio a la ilegalidad, Córdoba diagnosticó que los negocios más lucrativos de este país tienen que ver con recursos naturales, pero infortunadamente están vinculados a economías ilegales que son un pulmón importante para que estas sigan creciendo.
Por ello, explicó que es necesario que exista la inversión pública para poder garantizar productividad, “que la minería ilegal pase a ser minería formal con plan de reparación, asegurar que hoy todas las hectáreas que están inundadas de coca puedan pasar a procesos económicos y pecuarios, y tener un sello país, región o Chocó que garantice que los productos que vienen del territorio sean reconocidos”.
Escobar intervino para precisar que hoy tienen 69 hectáreas que han sido transformadas en coca y minería ilegal, economías ilícitas sobre las que se cimenta la guerra que afecta al Pacífico.
“La conservación de la naturaleza, de la biodiversidad y la acción climática tienen que ver con la guerra, por eso es necesario cuando hablamos de la paz con la naturaleza y la cultura, transformar esas economías ilegales en economías legales, por eso la creación de tres distritos mineros para la vida y la paz están claramente definidos con un decreto que tiene que firmar el Presidente, y eso nos permite quitarle oxígeno a esa economía ilegal”, aseguró.
Y reiteró que la renta de la coca ha empezado a acabarse en la zona de Tumaco, y aunque aún persiste en la zona de la cordillera, “nuestro trabajo es hacer esas trasformaciones territoriales para recuperarle a la delincuencia, a esta economía de la guerra, una economía de la paz”, puntualizó.