Los postes de Cali son imanes para los carteles de publicidad. Sin ser los únicos, los que se encuentran a cada lado de la concurrida Calle 25, por el sector de la Autopista Suroriental, dicen: “eliminamos fotomultas”.
Lo mismo ocurre, pero no de forma tan directa, en el barrio Salomia, en inmediaciones del Tránsito. Allí algunos ‘trapitos’ y comerciantes les siguen diciendo a los caleños en baja voz a dónde pueden acudir para hacer ese ‘trámite’.
El País conoció dos casos. Leidy es una mujer de 69 años, propietaria de un taxi que pone a trabajar todos los días. En marzo pasado, cámaras de foto detección multaron dos veces al taxi al no tener vigente la revisión técnico-mecánica.
Ella se puso en contacto con una mujer que le aseguraron podía ayudarle, “y en esos mismos días me bajaron las multas, finalizando el mes. Cada multa era por $600.000 y me las bajaron a $260.000 cada una”, contó. Leidy puso la plata y en cuestión de unos días, la sanción ya no estaba.
Felipe, protagonista del segundo caso, acumulaba multas desde el año pasado que ascendían a $3 millones, pero contactó a un abogado que “tenía contactos allá adentro (en la Secretaría)” y limpiaron los comparendos a su nombre y los que tenía su motocicleta.
Ahora están buscando quién los ayude para hacer lo mismo para un amigo suyo, que tiene multas de los últimos tres años por más de $10 millones. “Esta semana averiguamos y nos dijeron que eso está parado porque hay unos problemas internos en el Tránsito y que por ahora no están haciendo eso”, reveló.
Andrés Ávila, presidente de la Asociación Sindical de Agentes de Tránsito (Asagetran), consideró que pese a los cuestionables mecanismos que los ‘tramitadores’ utilizan para bajar las multas, la mayoría de estos procesos se logran “en derecho”.
“Resulta que desde el 2013 hasta el 2017 la Secretaría no ha depurado nada de multas, han dejado estas infracciones aquí en el sistema y obligan a la persona a que realice todo un proceso de petición para que le den de baja. Entonces eso se presta para que haya esto, pero es porque la misma Secretaría no ha hecho esa labor y sigue siendo el privado el que maneje toda esta cuestión”, explicó.
Según dice, hay muchos abogados y personas que se han hecho conocedoras de esta situación y de los procesos de controversia de comparendos, por lo que se les facilita lograr casos de éxito. Aun así, tienen una conexión irregular con alguien dentro del organismo de la Alcaldía para que les agilice el trámite.
“Ellos te van a sacar eso en dos días, tres días, lo que yo como usuario normal me demoraría 15 días, un mes o mes y medio para que me lo bajen. Entonces esto sigue funcionando, solo que ahora lo hacen con un poco más de cautela, pero aún hay muchas personas adentro que hacen eso y no solo estamos hablando de empleados públicos de la Secretaría, sino que también involucra a personal que labora en empresa privada”, añadió el líder sindical.
Frente a este tema, el secretario de Movilidad de Cali, Wilmer Tabares, aseguró que ya se está realizando un proceso fuerte de depuración de cartera, sobre todo de aquellos comparendos que, por caducidad, ya no son cobrables.
El funcionario indicó que esto podría ascender a un 20 % o 25 % del total de la cartera morosa de la entidad, y se espera que antes de que termine este año se tenga completo o muy adelantado este proceso.
También se refirió a las declaraciones que apuntan a que se siguen presentando las irregularidades. “Siempre son puros murmullos, pero nunca la gente llega con pruebas. De hecho, es muy normal, en el ejercicio de la autoridad, que la gente coloque quejas y coloque controversias, eso es muy normal porque la autoridad siempre es mal vista”, expresó Tabares Marín.
El Secretario recordó que no todas las exoneraciones de multas son corrupción, dado que las solicitudes de controversia pueden ser presentadas por los ciudadanos y si tienen razón en el caso, la multa debe ser borrada.
Asimismo, dijo que desde que inició el año se ha hecho una revisión exhaustiva de todos los comparendos y exoneraciones que se realizan, justamente para evitar anomalías en estos procedimientos. Esta revisión, agregó, fue la que llevó a hacer los hallazgos de 50.000 multas eliminadas este año, denuncia que fue enviada a los entes correspondientes.
“Adicionalmente tenemos un comité permanente, semanalmente nos reunimos para hacerle seguimiento no solo al tema de los comparendos, sino también al tema del recaudo, de la elaboración, es decir, en el caso de los agentes de tránsito: cómo elaboran los comparendos, cómo aplican la norma, si efectivamente estamos haciendo una buena aplicación o si no es la adecuada”, contó.
Por último, les pidió a los ciudadanos que “no coman cuento” con los individuos que se les acercan asegurando que pueden eliminar comparendos de forma irregular, pues dijo que esto no es cierto.
“Hay mucha gente que dice ‘no, yo le voy a bajar la multa’, y mucha gente ha llegado a nuestra oficina diciendo ‘mire, es que yo le pagué a alguien para que me bajara la multa y resulta que la multa volvió a aparecer’. No coma cuento, mire, si es un tema de derecho, un tema de prescripción es su derecho, usted no necesita un abogado, no necesita un intermediario, usted mismo vaya y haga su solicitud”.
Aún así, no todos ven a la entidad con ese manto de transparencia. El personero de Cali, Gerardo Mendoza, que ya ordenó el inicio de una indagación previa sobre el caso y la misma Secretaría, manifestó que lo revelado hasta ahora es solo el inicio de un cúmulo de presuntas irregularidades.
“Es solamente un punto que me va a abrir una estela de irregularidades que tienen que abordarse desde lo disciplinario para, con rigor, establecer las sanciones a las que haya lugar”, declaró.