Mientras en los primeros dos meses del año, el número de reportes por semana no superó la cifra de los 100, en las cuatro semanas de julio los casos no bajaron de los 400 (420, 425, 488 y 403, respectivamente).

De igual manera, en lo corrido del año ya va un total de 5621 personas que han contraído la enfermedad, presentando signos de alarma 2199 de estas y con clasificación de dengue grave en 62 oportunidades.

Estos son los datos que muestran el panorama del dengue en el Valle. | Foto: El País

Desde la Secretaría de Salud departamental explicaron que la intención es trabajar de manera articulada para contener la circulación y propagación del zancudo transmisor del dengue (Aedes Aegypti), y con esto, que la enfermedad dé tregua.

“Es una emergencia que vincula todas las organizaciones, las secretarías de la Gobernación y todos los sectores. Luchar contra el zancudo es una tarea común. Empezó una epidemia que estaba retrasada desde el año anterior gracias al Fenómeno de La Niña y que se prolongará hasta el primer semestre del año 2024″, expresó María Cristina Lesmes, secretaria de Salud del Valle.

Uno de los hechos más relevantes es que el 42,6 % del total de casos se han presentado en los menores de 15 años. De manera puntual, en la población menor de edad, el grupo de la infancia (que va de los 6 a los 11 años) es el que más reportes ha tenido, con un total de 1130 en el 2023, seguido por el grupo de la adolescencia (de los 12 a los 17 años), con 973, y por último la primera infancia (menos de 6 años), con 739 reportes.

En cuanto al panorama por ciudades, en Cali ha sido donde más se ha presentado la enfermedad, con 3724 casos hasta la semana epidemiológica 31, es decir, hasta el pasado 5 de agosto. Después están Yumbo, Palmira y Buenaventura con 604, 292 y 200 reportes de dengue, respectivamente.

Pero lo más sobresaliente es la situación en Yumbo, donde la incidencia de la enfermedad es de 619,8 casos por cada 100.000 habitantes, cifra que está muy por encima del panorama en todas las demás ciudades.

Ante esto, desde el Gobierno departamental explicaron que se acelerará la preparación de la vigilancia epidemiológica, mientras se mejora la capacidad de respuesta del Laboratorio Departamental de Salud Pública y se reajusta la destinación de recursos en la Secretaría de Salud del Valle.

María Cristina Lesmes explicó que “lo más importante es coordinar las acciones intersectoriales”, por lo que destacó la importancia de informarles a los vallecaucanos de la situación para “lograr el compromiso de las familias y personas, y tratar de bajar la epidemia del peor de los escenarios que tenemos previsto a un escenario medio, en el que los enfermos, las incapacidades, la ocupación hospitalaria y la pérdida de vidas humanas sea la menor”.

La epidemióloga Lyda Osorio, entendiendo la importancia de la ayuda de la comunidad, recomendó evitar la acumulación de basuras dentro y fuera de las casas, pues allí se acumulan los zancudos.

También aconsejó “mantener un suministro adecuado de agua potable para evitar que las personas tengan que almacenar agua; en aquellos casos en los que se tenga que almacenar agua, que se mantenga con tapa, y si notan que hay larvas de zancudo en el agua lavar el recipiente con cepillo para retirar los huevos del zancudo”.

En Cali, las autoridades decretaron la calamidad pública desde el pasado 1 de agosto, luego de un Consejo Municipal de Gestión del Riesgo. Foto: Alcaldía de Cali. | Foto: Semana

Por su parte, Javier Reina, epidemiólogo de la Secretaría de Salud de Cali, ciudad en la que hay una declaratoria de calamidad pública vigente, también entregó recomendaciones.

“Tenemos que revisar en nuestras casas y en nuestro entorno qué espacios pueden albergar agua, en esos espacios tales como llantas usadas, plantas acuáticas y demás son los lugares predilectos para que el zancudo Aedes Aegypti deposite sus huevos y continúe reproduciéndose. Después de que estos lugares sigan presentándose en estas comunidades, continuarán la presencia del zancudo del dengue”, dijo.