En la madrugada del domingo 3 de diciembre del 2023, un escalofriante hecho ocurrió en el barrio Santa Fe del oriente de Cali, en el cual una mujer fue asesinada por un inquilino que vivía en su casa, quien le propinó varias heridas con arma blanca, ocasionándole la muerte en el lugar.
“A la 1:20 de la mañana ingresa una llamada a la línea 123 en donde informan que una mujer de 57 años presenta heridas por arma blanca en varias partes del cuerpo y lastimosamente fallece en la residencia”, fue lo que detalló en su momento el Teniente Coronel Jhon Zambrano, comandante Operativo de la Policía Metropolitana Santiago de Cali.
No obstante, tres meses después de este asesinato, en las últimas horas, el hijo de la víctima hizo una denuncia pública al respecto por medio de un video en su cuenta de Instagram. El joven, quien se identifica como Camilo Echeverry, empieza asegurando que este caso en la Fiscalía no ha tenido un análisis profundo desde una perspectiva de género, ya que, según él, hay muchas objeciones al escrito de acusación que realizó el fiscal de la seccional 40 de juicios de la Unidad de Vida.
“Da la casualidad que la audiencia programada para el 8 de marzo, en el día de la conmemoración de la mujer, esta gente ni siquiera se haya tomado el trabajo de analizar ni el contexto, ni las evidencias, ni absolutamente nada en profundidad”, indicó el joven.
Posteriormente, asegura que en el escrito de acusación dice que el caso fue un homicidio agravado, pero presuntamente este mismo se contradice porque existe la probabilidad de que el victimario haya sido el culpable. “Lo quiere dar a entender como si este individuo hubiera querido lesionar a mi mamá sin asesinarla”, precisa.
Cuando relata como fueron los hechos en aquella madrugada, su madre se encontraba en la cocina preparándose un té y Camilo desde su habitación escucha que se abre una segunda puerta que era la del inquilino, quien en el tiempo en que vivió en dicho lugar nunca se levantaba tarde en la noche. El presunto feminicida empieza a preguntarle a la víctima que cuando se iban a tomar una cerveza y en ese momento el joven decide salir de su habitación.
“Este feminicida se encuentra en bóxer intentando abrazarla y tocarla, ahí es cuando me abalanzo a él y este empieza a lanzarle serias puñaladas alrededor de su pecho(.....) Intento alejar a mi mamá, pero como había cogido el cuchillo con las manos para quitárselo, me hizo unos cortes y no pude hacer más allá simplemente de correrla para que escapara y ahí es cuando él se abalanza sobre mí, me provoca unas lesiones con el mismo cuchillo y mi mamá, al ver esto, se devuelve en el afán de defender a su hijo”, detalla Echeverry.
El joven comenta que el victimario se habría aprovechado de que su madre se encontraba en un estado de indefensión y, por tanto, al parecer creía que su primogénito en ese momento no se encontraba dentro de la casa. Asimismo, en cuanto al escrito de acusación de la Fiscalía, Echeverry indica que el asesinato está como catalogado que fue a causa de un arma de fuego, ya que en sus palabras, “en el momento de los hechos no hubo ningún arma de fuego”.
Incluso, advierte que el ente acusador no ha tomado en cuenta las evidencias que ha recibido y ni siquiera una entrevista que el mismo Camilo Echeverry le concedió a una investigadora del CTI que duró alrededor de cuatro horas.
Además, los investigadores de la Fiscalía sugerían que la mujer tenía una relación con el victimario a lo cual Echeverry se negó, sin embargo, reconoce que sí había una relación de confianza entre los dos, ya que “el tipo utilizaba la ducha, la nevera, el lavadero e incluso como mi mamá era estilista le cortaba su cabello”. Y aclaró que “si había una relación de confianza, pero no sentimental”.
Finalmente, exigió que durante la audiencia de este próximo viernes cambien la tipificación “por lo que es un feminicidio”.