Así como lo puede ser el constante lavado de manos, el aislamiento social es una de esas reglas de oro en tiempos de pandemia. Y a medida que la cuarentena se flexibiliza a nivel nacional y local, han surgido diferentes propuestas para mantener esa sagrada regla de dos metros entre personas, como es el caso de propender el uso de la bicicleta, tal como lo señala una propuesta que la Mesa de Transporte No Motorizado de Cali presentó hace dos semanas a la Alcaldía.
Pese a que el MÍO solo cuenta con un porcentaje de ocupación del 22 % en sus 750 buses que operan estos momentos en la ciudad -el gobierno autoriza el 35 %-, mientras la reactivación económica se amplía a diferentes sectores, la circulación aumentará y, en consecuencia, al haber más trabajadores en las calles, los riesgos de contagio son mayores.
Cabe recordar que el transporte público en el Valle del Cauca se ha reducido en un 77 % durante la cuarentena, según datos publicados por Google (que no detalla específicamente en los de Cali).
“La idea es evitar lugares cerrados como buses para reducir los riesgos de contagio al máximo. Con la reactivación de esas industrias, cuyos trabajadores se encuentran la mayoría en el oriente, hay ciertos corredores que aumentarían su demanda en todos los sectores, pues esos puestos de trabajo no están concentrados por áreas, sino dispersos en toda la ciudad”, explicó Janeth Mosquera, experta en movilidad sostenible y vocera de la Mesa de Transporte No Motorizado.
Es por eso que el documento presentado por la organización sugiere al Municipio que implemente bici-carriles temporales en dos tramos que atraviesen toda la ciudad. El primero, ubicado en el costado occidental, se estable en la Portada al Mar, en la conexión hacia el Bulevar del Río, en la Calle 5 hasta Ciudad Jardín y también en la Carrera 15 que permite conectar hacia el oriente. Y el segundo tramo, es toda la Autopista Simón Bolívar.
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Pero la propuesta no termina ahí, dado que también se recomienda la adecuación de los bicicarriles en dos jornadas: una en la mañana hacia el centro, entre las 6:00 y 8:30 de la mañana, y otra en la tarde hacia los extremos de la ciudad, entre las 4:00 de la tarde y 7:30 de la noche.
“Adicionalmente, se deberán hacer monitoreo de la movilidad para definir las rutas por las cuales se ha incrementado el tránsito de ciclistas, para así poder establecer nuevos corredores que garanticen la conectividad entre las ciclorrutas temporales y brindar mayor seguridad a los ciclistas”, agrega el documento de la Mesa, que propone el uso de conos para separar a los bicicarriles de las vías por donde transiten los vehículos.
Para Mosquera, “con la pandemia tenemos una gran oportunidad de repensar la ciudad de una forma más sustentable y de mejor justicia social para esas personas que no pueden comprar un vehículo (66 de cada 100 caleños posee una bicicleta en casa, según la Encuesta de Movilidad del 2015). Esta Administración está un poco lenta respecto a esa propuesta: si bien han afirmado que es necesario, pero a la hora de hacer implementarlo de forma concreta se quedan un poco cortos al respecto”.
Frente a esto, William Vallejo, secretario de Movilidad de Cali, aseguró que la propuesta ya fue recibida y es un “insumo importante para la implementación de ciclorrutas temporales, que ya empezaron a demarcarse -desde el pasado lunes-, pero sumando la Avenida Ciudad de Cali y la Calle 70. En total, son 50 kilómetros”.
Además, recordó que uno de los proyectos claves del Plan de Desarrollo será la implementación de bicicletas públicas. “En el 2016 ya había una propuesta estructurada, pero no estaba lo suficientemente robusta para un proceso de adjudicación, por lo que tras una alianza con una organización internacional entre el 2018 y 2019, se pudieron establecer las zonas en donde podrían realizarse junto con las estaciones para parquear las bicicletas. En estos momentos, la propuesta está en una evaluación final para continuar con la licitación e implementación”, anotó el funcionario.
Cabe indicar que la primera versión del Plan de Desarrollo traza la meta de incrementar los kilómetros de ciclo-infraestructura de 120 kilómetros, que es la cifra de cierre en 2019, a 166 kilómetros entre el 2020-2023 por parte de Metrocali y la Secretaría de Infraestructura. Además, busca que la Secretaría de Movilidad eleve la red de bicicarril señalizado de 12 a 22 kilómetros.
“Dada las reducciones en el tráfico de la ciudad, la calidad del aire ha mostrado una gran mejoría. Esto es bastante importante no solo por la salud de los caleños, sino que también reduce las afectaciones respiratorias, las cuales aumentan los riesgos a la hora de contraer Covid-19”, explicó el funcionario.
Por su parte, el concejal Juan Martín Bravo comentó que las bici-estaciones se convierten en una estrategia clave para enfrentar el hurto de bicicletas en la ciudad, que en el 2019 llegó a 383 casos, según el Observatorio de Seguridad de Cali.
“Creería que el Municipio debe apostarle a un Día de la Bicicleta, que ojalá vaya de la mano con el de No Carro. Sería un ahorro muy importante en términos financieros y mejoría del medio ambiente, pero también en cuestiones de salud. Es una estrategia que debe ir hilada con una campaña de mayor uso de la bicicleta, que también puede beneficiar al turismo, dado que se trata de un medio de transporte con el que el visitante podría tener más conexión y cercanía con la ciudad”, aseveró el cabildante.
BiciMÍO para personal de la salud
Luego de que las 100 bicicletas que hacen parte del sistema de transporte masivo dejaran de operar desde finales del 2019, Metrocali las reactivará esta semana para que sean utilizadas solo por el personal de salud de la capital vallecaucana y sin ningún costo.
Así lo dieron a conocer voceros del ente gestor del MÍO, quienes añadieron que esto es una alternativa ideal para no haya un mayor nivel de ocupación de los buses.
“Si bien el lunes de la semana pasada se viralizaron tres o cuatro fotos de rutas que estaban llenas, en la tarde de ese día y de los posteriores, se estableció un fuerte control para que se respete el distanciamiento durante la pandemia. Por eso es que la Policía, funcionarios de la Secretaría de Seguridad y nuestros se encargan de evitar esas aglomeraciones”, afirmó el funcionario.
Cabe recordar que la orden dada por el Ministerio de Transporte es que ningún vehículo de transporte público puede superar el 35 % de su ocupación.