Por Santiago Cruz Hoyos - Editor de Crónicas y Reportajes
La maratón de las elecciones comienza a correrse a las 3:30 de la madrugada del 29 de octubre de 2023. A esa hora, la Policía y empresas de seguridad privada sacan de unas bodegas custodiadas por la Fuerza Pública los tarjetones electorales, para enseguida distribuirlos por 32 rutas vigiladas hacia las 5357 mesas de votación que tiene Cali, en el que sin duda es el ‘domicilio’ más complejo y monumental del año.
Los kits electorales están en cajas embaladas, y las únicas personas autorizadas para manipularlas son los delegados de la Registraduría, que tienen hasta las 7 de la mañana para que en cada mesa estén los tarjetones. Son en total 1.816.000. Ese es el número de personas aptas para votar en Cali.
En las mesas, los tarjetones son recibidos y verificados por los jurados de votación, otros ‘maratonistas’ de las elecciones que madrugan. A las 7:00 de la mañana deben estar en su mesa correspondiente, y tendrán un día largo: su trabajo termina después de completar el escrutinio de las mesas y entregar el ‘sobre de claveros’. Es donde están los formularios electorales con los votos.
El sobre lo recibe un delegado de la Registraduría, entidad que, solo para el Valle del Cauca, dispone de 7000 ‘corredores’, o mejor, funcionarios dedicados a trabajar en las elecciones. Entre ellos hay varias especialidades, explica Lina Susana Vásquez Millán, delegada del Registrador para el departamento
Están por ejemplo los funcionarios de Infovotantes, encargados de orientar a las personas que no conozcan cuál es su mesa de votación; están también los transmisores, encargados del voz a voz: envían la información de la lectura de los E14 hacia un centro de recepción telefónica donde se emiten los boletines respectivos con los resultados. (Los formularios E-14 son los documentos que contienen el número exacto de votos).
Igualmente hay funcionarios de la Registraduría desplegados en 11 cárceles del Valle del Cauca, para garantizar que los presos y los funcionarios del Inpec voten.
Además, entre los maratonistas de la Registraduría hay expertos en la lengua de señas. Algunos tarjetones están en braille.
Cuidar esos votos, garantizar que no haya ninguna irregularidad en el conteo, es un trabajo que en gran parte recae en los testigos electorales, otros ‘corredores’ de este domingo. No solo deberán madrugar a las mesas de votación. También tendrán que quedarse después de las 4:00 de la tarde para verificar el conteo de los votos.
Los votos, una vez contados en las mesas, se transportan hasta el antiguo Supermercado La 14 del barrio Valle del Lili, donde se terminará a la madrugada del lunes o quizá hasta el martes el escrutinio final.
También dispondrán de un equipo de 40 abogados que recorrerán la ciudad para verificar que no se cometa ningún delito electoral. Igualmente, la campaña de Eder contrató una empresa que ofrece un software para hacer la revisión en tiempo real de los resultados “y prevenir posibles alteraciones en los formularios E14″.
La campaña de la candidata a la Alcaldía, Miyerlandi Torres, informó que tendrán 1270 testigos electorales, que se distribuirán en los puestos de votación de mayor afluencia, mientras que la campaña del candidato Roberto Ortiz aseguró que “no estaba autorizada” para revelar el número de testigos. Ninguna de las campañas dijo tener un equipo dedicado a transportar a sus electores hacia las mesas.
Los candidatos también madrugan en la ‘maratón’ de la democracia. A las 7:30 de la mañana, por ejemplo, Roberto Ortiz asistirá a una eucarística privada con su familia. Luego, hacia las 9:00 a.m., votará en el colegio Ciudad de Cali del barrio 12 de octubre, acompañado por su esposa, Olga Lucía Campos. Después se desplazará donde su mamá en el barrio El Sindical para almorzar, y se regresa a su casa a esperar los resultados.
Miyerlandi Torres votará a las 8:00 a.m. en la Universidad Icesi, y luego visitará a los líderes de su campaña . Su discurso tras conocerse los resultados del preconteo lo dará en su sede principal, en la Avenida Roosevelt #24-131.
Alejandro Eder votará a primera hora en La Campiña, y esperará los resultados en familia.
Es curioso: todos los candidatos aseguran que van a ganar, como si se tratara de un mantra. La campaña de Roberto Ortiz comenta que a las 6:30 de la tarde el candidato llegará al barrio Sindical, “para su encuentro con medios y seguidores y ofrecer su primer discurso como alcalde electo de Cali”. Lo mismo informa la campaña de Alejandro Eder: “nos vamos a reunir en la sede para celebrar el triunfo y poderle contar a Cali que la vamos a revivir”.
Mientras tanto, hay otros maratonistas de la carrera por la democracia, aunque casi nunca son mencionados, pese a que su trabajo es imprescindible. Para garantizar el fluido eléctrico, Emcali dispuso de un personal para vigilar 166 circuitos y 23 subestaciones. Habrá una planta de emergencia para el escenario de escrutinio, la 14 de Valle del Lili. También cuadrillas recorriendo los barrios.
Los Bomberos tendrán máquinas y ambulancias en los puestos de votación de mayor concurrencia como el Coliseo El Pueblo o el estadio y además estarán presentes en el Puesto de Mando Unificado que convoca la Alcaldía, mientras que en el Hospital Universitario del Valle hay un plan en caso de emergencias.
John Sandoval, jefe coordinador del servicio de urgencias, dice se cuenta con la capacidad instalada de 120 camas, y 30 más adicionales si son requeridas. Las especialidades de cirugía general, ortopedia, pediatría, medicina interna, trauma y emergencias estarán disponibles las 24 horas. “Y tenemos un plan de llamado a especialistas en caso de necesitarlos”.
En la maratón de la democracia de este domingo debuta un grupo curioso de ‘corredores’: los peluqueros de Shift Experience. Es una peluquería ubicada en Mayapán – Las Vegas, detrás de la 14 de la Avenida Pasoancho. Por primera vez, decidieron abrir un domingo, este domingo, con el propósito de incentivar que Cali ejerza su derecho al voto y bajar la abstención. A quien presente su certificado electoral, le darán un descuento.