Hasta $42.000 millones anuales estaría perdiendo el MÍO por cuenta de la piratería, la evasión y el paralelismo, es decir, rutas de servicios ajenos que se prestan en recorridos similares a los del Masivo. Estos son costos que, según han denunciado los cuatro operadores, representan un déficit de 60.000 pasajeros diarios.
“Son recursos que se deberían invertir directamente para la operación del sistema, para que funcione de forma más eficiente. Sin embargo, hay más de 180 buses sin operar en los patios y talleres, por lo que urge que Metrocali los ponga a funcionar totalmente en horas pico y un poco menos en horas valle”, aseguró Eduardo Bellini, gerente de Blanco y Negro.
De acuerdo con él, si hubiese más buses rodando en las calles podrían recuperarse una buena parte de esos pasajeros que optan por el transporte informal al considerar que son más rápidos que los buses del MÍO.
Además, agregó, se reducirían los riesgos por contagio de covid dentro de los vehículos del Sistema.
El empresario aseveró: “Con esto se puede ayudar a solventar el déficit financiero en lo corrido del año (que es más de $480 mil millones por ingresos en la tarifa). Lo que no puede ocurrir es que se quiera solucionar un problema financiero que tiene el Municipio a costillas del usuario”.
Además, Bellini afirmó que la Policía y Metrocali deben prestar atención a la venta de tarjetas ilegales, la cual suele efectuarse en puntos cercanos a las paradas del MÍO, dado que esto implica menos ganancias para el sistema de transporte.
Lea también: Pico y placa en Cali se mantiene hasta el 18 de enero, así quedará la medida tras la rotación
Por su parte, Óscar Ortiz, gerente del ente gestor del MÍO, indicó que ya fueron identificados los cinco corredores que más afectan la operación por cuenta de la piratería. Estos son la Avenida Ciudad de Cali, la Carrera 8, la Avenida 4 Norte, en el sector de Floralia, la Pasoancho y la Autopista Suroriental.
“Hemos habilitado 14 rutas alimentadoras que antes solo estaban disponibles en horas pico, pero que ahora funcionan todo el día, de 5:00 de la mañana a 9:30 de la noche de lunes a sábados, y festivos de 6:00 a.m. a 8:30 p.m. Esto nos permitirá dar mayor cobertura y frecuencias a sectores del sur como Comfandi, Universidades, Meléndez y el corregimiento La Buitrera, pero también a la Comuna 5, la Portada al Mar y Chiminangos”, destacó Ortiz.
A esto se suma, señaló, el fortalecimiento del servicio en la Avenida Ciudad de Cali, con la P12A,m con frecuencias de ocho minutos en horas pico de la tarde y diez minutos en horas valle, así como en la Carrera Octava, con pasos más constantes de la ruta P40A en su conexión entre el centro y el oriente de la capital vallecaucana.
El gerente de Metrocali aseguró: “Como Administración, continuamos haciendo grandes esfuerzos para fortalecer el servicio del MÍO y aumentar la demanda de pasajeros. Nuestras estrategias también van encaminadas a que los usuarios apoyen el transporte legal y hagan uso del Masivo”.
El funcionario recordó que actualmente hay 620 buses operando, más 50 que se encuentran en reserva por situaciones especiales, por lo que en los patios hay 110 que si bien tienen el certificado de disponibilidad, se irán vinculando al Sistema a medida que la demanda aumente, pues hoy se encuentran en 201.000 pasajeros diarios en promedio, es decir, menos de la mitad respecto al año pasado.
Le puede interesar: Las cuentas pendientes del polémico alumbrado navideño móvil de Cali
En cuanto al temor de contagiarse por covid que algunos caleños arguyen para no usar el MÍO, Ortiz replicó: “Un estudio de la Universidad Nacional, adelantado en el metro de Medellín, reveló que los sistemas masivos no son foco de contagio, siempre y cuando se respeten las medidas de bioseguridad, al contrario de algunas vehículos que prestan un servicio colectivo hasta con cuatro personas que no guardan distanciamiento”.
Por su parte, Edwin Candelo, subsecretario de Movilidad de Cali, sostuvo que más de 2720 comparendos (ver gráfico) se han impuesto a personas que desarrollan actividades relacionadas con transporte informal.
“Eso viene acompañado de una sanción de aproximadamente $900.000 y la inmovilización del carro por mínimo cinco días. Si el conductor es reiterativo, su licencia puede ser suspendida hasta por tres años”, afirmó Candelo.
Entre los puntos críticos de esta actividad están las entradas de la ciudad, los alrededores de las plazas de mercado, la Calle Quinta y Autopista la Simón Bolívar. Agregó que en los últimos días han fortalecido los controles en la Autopista Suroriental entre carreras 44 y 56.
“Hemos renovado y fortalecido el equipo de agentes de Tránsito para afrontar la piratería, por lo que al día de hoy tenemos 60 de ellos dedicados, entre otras labores, a hacer frente a esa situación. Si bien las cifras por sanciones han disminuido respecto al 2020, debido a que en la cuarentena no podían circular carros particulares, el transporte informal es uno de los mayores problemas de movilidad de la ciudad”, afirmó Candelo.
Taxistas piden ser servicio colectivo
El gremio de taxistas en Cali solicitó a la Alcaldía que autorice a que cierta cantidad de taxis hagan recorridos colectivos, con el fin de responder a las dificultades que ha presentado el Sistema Masivo durante la pandemia.
De acuerdo con Jhonny Rangel, vocero de la Mancha Amarilla, los vehículos operarían en las vías en donde no haya tanta cobertura del transporte público, además de que pueden portar una calcomanía en el parabrisas para que estén identificados.
Hasta el momento la Administración no se ha pronunciado al respecto. Sin embargo, la Secretaría de Movilidad informó que por el momento considera el servicio colectivo como algo irregular, por lo que advertirá a los taxistas que ya han sido identificados mientras realizan estas actividades.
No deje de leer: Cierran dos carriles de la Calle 5 con Carrera 62, sentido norte-sur, por obras de Emcali