Por Gerson David Hincapié, periodista de Cali
Luego de la publicación de El País sobre los impactos en los cerros de Cali por la práctica de enduro, Fabio Orejuela, representante en Cali de los grupos que realizan esta actividad, manifestó que no son malas personas ni buscan perjudicar a las comunidades y al medio ambiente.
“Nosotros hemos tenido una participación activa con la comunidad en algunos casos, como en el sur, para tener servidumbres en las que se hace trabajo social. En los meses de diciembre, por ejemplo, se reúnen recursos y se aporta en el mantenimiento de las vías, que finalmente son las que ellos necesitan para salir y nosotros hacemos, en algunos casos, recolectas de dinero para beneficiarlos”, explicó el deportista.
Orejuela contó que pertenece a un grupo de entre 80 y 100 personas que practican enduro en Cali, pero que no es el único y habría más gente en esta actividad. Aseguró además que “lo que nosotros pedimos es que no se nos satanice ni nos estigmaticen”, y dio precisiones sobre lo que ocurre en diferentes puntos de la ciudad.
En lo que concierne a la zona de Bataclán - Tres Cruces, donde hay varias carpas, una pista y caminos ya establecidos, sostuvo que ese terreno es de propiedad privada y que el dueño del mismo decidió hacer las pistas para que se practique allí este deporte.
Asimismo, si bien reconoció que en los cerros de Los Farallones ellos no cuentan como tal con un permiso por escrito para realizar enduro, ya se han encontrado a funcionarios de Parques Nacionales, quienes solo les han dicho que regulen la velocidad.
“A todos los caleños nos tocó ver cómo este año se nos quemaron los cerros por invasores y manos criminales, de las cuales nosotros podemos dar alertas tempranas. Los verdaderos problemas de nuestros cerros tutelares se llaman la invasión y la minería ilegal, y también hemos dado aviso en casos como esos, entonces no es una relación absolutamente negativa”, añadió.
Sin embargo, comunidades de los corregimientos de Los Andes y Villacarmelo han denunciado daños en sus redes de suministro de agua y un trato agresivo por parte de muchos moteros cuando han intentado dialogar con ellos.
Ante esto, el representante de estos grupos en Cali señaló que no todas las personas reaccionan bien con las pulsaciones altas, pero que ya se habló en los grupos para que eso no se vuelva a repetir.
“La invitación que nosotros hacemos como grupo de moteros es a organizarnos para poder minimizar esos impactos y buscar una solución donde les garantice a ellos el agua”, dijo.
Por último, pidió una vez más que no se les estigmatice, mientras se llega a acuerdos de las comunidades y se logra un acompañamiento desde la Administración. “Para el grupo es muy importante poder tener cercanía con el alcalde entrante, Alejandro Eder, para que las secretarías de Deporte y Desarrollo Económico se fijen en estos deportes emergentes, que pueden ser una oportunidad para la región”.