En medio del debate de control político realizado a Metrocali en el Concejo de la ciudad, surgieron posiciones encontradas.
Por un lado la empresa que administra el MÍO sostiene que ha mejorado las frecuencias y ha logrado tener una mayor puntualidad. Esto, según la entidad, ha permitido un incremento de 2.835.000 pasajeros entre enero y mayo de 2024. A ello se suma el haber puesto en operación 57 buses adicionales a los que tenía la flota el año anterior.
Por otro lado en el Concejo cuestionan que la operación del sistema integrado de transporte masivo de pasajeros SITM, conocido como MÍO, estaría socavando diariamente las arcas del Distrito Especial, “depredando el poco transporte público que queda, como el Transporte Público Colectivo, TPC, y las gualas”.
El concejal citante al control político, Flower Rojas, expresó que el Distrito le ha entregado a Metrocali en los últimos ocho años, $1,5 billones y el sistema no mejora.
“Dejamos de invertir socialmente en Cali para que el MÍO opere y no se logra tal cometido, hemos dejado de hacer obras como el puente de Chipichape para evitar congestión e inundaciones; mucho menos recuperar la Avenida Sexta, tampoco se pudo invertir en becas para solucionar los problemas de Metrocali”, detalló Rojas.
Para el concejal, los problemas más evidentes son la demora en rutas por baja frecuencia, lo que lleva a que los ciudadanos utilicen plataformas digitales o el transporte informal.
Por su parte, el presidente del Concejo, Carlos Andrés Arias, solicitó se diga cuánto más le costará a Cali el continuar sosteniendo la operación del MÍO.
Arias también cuestionó que se sigan tomando los recursos de los caleños para pagar a los operadores por kilómetros recorrido cuando no ofrecen el servicio adecuado “y donde se necesitan los buses aún no hay rutas establecidas. Como vemos el transporte público de pasajeros tiende a desaparecer, porque ni las gualas ni colectivos podrán soportar el modelo financiero que se les plantea”, anotó.
Operan con reserva
En el debate, el presidente de Metrocali, Álvaro Rengifo, reiteró que sí se ha avanzado en generar las condiciones para que las gualas y los buses del transporte tradicional se integren al sistema. Por ejemplo, en el acuerdo con Blanco y Negro Masivo se redujo la zona de exclusividad del MÍO y se viabilizó que cuando se repongan los buses del masivo, estos no sean chatarrizados, sino operados por los sistemas de transporte complementario, como alimentadores.
“Nosotros sí vamos a integrar a las gualas y al transporte tradicional. Tenemos mesas de trabajo con las empresas del transporte colectivo y estamos atendiendo mesas convocadas por la Procuraduría con los pequeños propietarios”, informó el directivo.
“Hemos pasado de un cumplimiento del 79 % al 93 %, y de una puntualidad del 74 % a más del 83 %. Se han reducido en más de un 50 % las salidas de operación por varadas de los buses y estamos operando con reserva, algo que nunca se había hecho, para que cuando un bus se vare, llenemos el espacio rápidamente”, agregó Rengifo.