Pese a la difícil situación legal y financiera por la que atraviesa Metrocali, el ente gestor del Sistema Integrado de Transporte Masivo MIO, y a la necesidad de atender asuntos importantes para el futuro de la empresa, presuntos favorecimientos políticos han demorado el nombramiento de un presidente en propiedad.

Esa es la explicación reiterada en círculos políticos de Cali para que 45 días después de iniciado el gobierno de Jorge Iván Ospina aún la empresa siga con un presidente encargado, mientras desde el Concejo insisten en designar cuanto antes el titular.

Y es que son varias las razones, de acuerdo con quienes conocen la empresa, por las que es necesario nombrar de inmediato a un presidente y no haber perdido un mes y medio en negociaciones que tienen que ver más con burocracia y deudas políticas que con la razón de ser de Metrocali.

Entre ellas el apalancamiento de lo que se logró en la modificación de los contratos con los operadores y que exija que saquen la flota para salvaguardar el sistema. Y un presidente que entienda que en los últimos años se asumieron grandes responsabilidades y que saque provecho de los recursos aprobados en el Plan Nacional de Desarrollo.

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“Un presidente encargado no asume retos grandes porque no sabe si va a estar uno o diez días y por eso están estancadas las decisiones importantes en Metrocali. Tras el fallo adverso con GIT Masivo, esta empresa había trasladado su obligación en un 70% a Bancolombia y ese el deudor principal por lo que debería ya un presidente estar en diálogo permanente con el banco definiendo la forma en la que se cubrirá la obligación”, dijo una fuente.

Es más, agrega, “debería estar un presidente en propiedad presionando a Unimetro para que entregue los buses que debe agregar a la flota so pena de ejecutar la caducidad, pero un gerente encargado no se da ese tipo de pelas. Hoy lo único que preocupa en Metrocali es modificar el manual de funciones”.

Así lo ha advertido también desde el Concejo de Cali el cabildante Roberto Ortiz, quien asegura que tras esta demora de 45 días para elegir a un presidente “hay una clara intención de pagarle un favor político a alguien”.

“El 24 de enero denunciamos en el Concejo que se pretende cambiar el perfil del presidente y de otros cargos directivos. Cuando le pregunté al señor (Juan Carlos) Echeverry, presidente encargado de Metrocali, lo que argumentó es que hay un decreto que obliga a que cada dos años se revisen los perfiles y lo que uno esperaría es que se modifique para tener funcionarios más preparados y no para ajustar el cargo a una persona de nivel inferior que no llena los requisitos”, dijo Roberto Ortiz.

¿Deudas de campaña?

Aunque en varios sectores consideran innecesario modificar el manual de funciones, el gobierno actual vendría ajustando los requisitos como molde a los zapatos de un presidente que en círculos políticos saben desde hace un mes su nombre y el de su jefe político.

Por todos es conocido que si en los próximos días no ocurre algo extraordinario, el presidente de Metrocali será el exconcejal Óscar Javier Ortiz, quien recibiría la empresa en pago al apoyo que le dio a Ospina su jefe político, el concejal liberal Fabio Arroyave, en la campaña por la Alcaldía.

Al respecto el concejal Arroyave le dijo a El País que “si el alcalde Ospina mañana mira a una persona de nuestra organización para ayudarle a resolver los problemas de Metrocali, nosotros lo vamos a respaldar”.

“El Alcalde de Cali es autónomo en sus decisiones y la agenda de Metrocali no es la agenda del concejal Fabio Arroyave porque lo que hemos hecho es control político... Sea que nombre al exconcejal Óscar Ortiz o que mire a quien sea, lo que creemos es que el Alcalde no puede fallar en el tema de Metrocali”, dijo Arroyave.

Agregó que no es cierto que exista interinidad, “el Alcalde encargó a uno de los hombres más conocedores de Metrocali, que viene de gobiernos nefastos anteriores, pero el alcalde Ospina lo ha dejado al frente porque el doctor Echeverry es una persona que tiene su confianza y que lo está haciendo bien”.

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Curiosamente, Echeverry venía desempeñándose como Jefe de Planeación de Metrocali en el gobierno Anterior y el propio Ospina a través de sus redes sociales había criticado su papel.

“Debo ser sincero, me siento realmente burlado y frustado al ver al inicio de nuestro Gbno al Miocable cerrado, producto de la falta oportuna de mantenimiento. En dónde estaban los funcionarios de MetroCali ? No les da vergüenza ? Deberían renunciar YA por ineptos”, escribió Ospina en su Twitter.

Terna de uno

La demora en la designación de Ortiz, aseguran las fuentes, obedece a que es contador público y el manual de funciones de Metrocali no contempla que un contador pueda presidir la empresa. Sin embargo, ese lío sería subsanado en el nuevo manual que aprobará la Junta Directiva, que entre las únicas cosas que cambia es el anexo que señala que Contaduría también es una carrera afín para dirigir Metrocali.

Roberto Pizarro, delegado del Gobierno Nacional en la Junta Directiva de Metrocali, indicó que las modificaciones son en realidad muy simples y que lo lógico es tener ya el presidente, pero hay un encargado que ha hecho la tarea bien y la junta ha participado activamente en el proceso de operación.

Aseguró Pizarro que desconoce la versión de que ya se sabe quién será el nuevo presidente de Metrocali “porque nosotros no hemos conocido aún la terna ni los candidatos. El proceso se inicia con una terna que presenta el Alcalde y la Junta Directiva evalúa si cumplen con los perfiles y luego, según el estatuto, el Alcalde selecciona”.

Óscar Javier Ortiz, quien sería el próximo presidente de Metrocali a falta de realizarse el proceso de selección y sin que se conozca aún la terna, aseguró que por ahora es asesor del Alcalde, que no se ha tomado ninguna decisión referente a la Presidencia y que el manual se debe ajustar cada dos años según la normatividad.

“No es lo que la gente está planteando frente a eso. Por competencias laborales, el área general se llama ciencias económicas administrativas y contables y en las versiones anteriores se había cometido un error y habían dejado contaduría por fuera. Estaba administración de empresas, estaba economía y faltaba contaduría. Lo mismo el área de derecho es muy amplia y se cumple con el propósito principal de Metrocali y se tienen en cuenta todas las funciones del cargo y la experiencia se mantiene”, indicó Ortiz.

“Lo que se hizo fue un trabajo muy minucioso, muy certificado, muy acucioso de toda la planta, la hicieron las personas de Metrocali que conocen la entidad y lo que ha querido es ajustarse el tema, pero no con la intención que la están vendido; si el alcalde determina que le puedo servir a la ciudad desde allá, desde movilidad o donde lo determine, estaré dispuesto a acompañarlo”, concluyó Óscar Ortiz.

Quienes conocen la empresa señalan que si en realidad se quiere buscar el Presidente que demanda Metrocali, lo ideal es buscar los mejores perfiles y enviarlos a una firma cazatalentos y que entreguen un concepto, pero la excusa de nombrar presidente so pena de que están modificando el manual de funciones es inaceptable.

No está de más recordarle al Alcalde, indican exfuncionarios de Metrocali, que dice que le entregaron un proyecto acabado, en ley de insolvencia, “que fue él en su primer gobierno quien lo estructuró y lo puso a funcionar, el que no subió la tarifa al usuario durante todo su gobierno y que en el laudo arbitral señala que la negociación de Jorge Iván Ospina en el 2011 fue ineficaz y por eso se condenó a pagar cien mil millones de pesos a GIT Masivo. Ahora sale a decir que le entregaron algo malo”.