La Procuraduría General de la Nación ordenó la apertura de una indagación previa contra funcionarios de la administración del exalcalde Jorge Iván Ospina, por el presunto mal estado en el que se entregaron más de la mitad del parque automotor con el que se arreglan calles en Cali, Valle del Cauca.
La Provincial de Instrucción de Cali señaló que según medios de comunicación local los funcionarios estarían vinculados al distrito especial deportivo, cultural, turístico, empresarial y de servicios.
La administración del mandatario recién posesionado, Alejandro Eder, advirtió que muchos de los vehículos estarían inactivos por fallas mecánicas.
Así mismo, el organismo de control advirtió que al parecer solo 52 de los 130 carros disponibles, incluida la maquinaria amarilla, se encuentran activos y en funcionamiento, lo que equivale a un 54 % fuera de servicio.
De igual manera la entidad aseguró que se revisará la documentación que dejó sin respuesta el personal que tuvo a su cargo la tarea hasta el pasado 31 de diciembre, entre lo que se encuentran 2.773 derechos de petición y 41 fallos de incumplimiento, así como el estado de las 17 obras suspendidas y que debieron ser entregadas antes del cambio de administración.
La Entidad ordenó la práctica de inspección disciplinaria para recaudar las pruebas que permitan establecer la ocurrencia de conductas presuntamente irregulares, determinar si son constitutivas de falta disciplinaria o si los sujetos procesales actuaron al amparo de una causal de exclusión de la responsabilidad.
En medio de una entrevista, Luz Adriana Vásquez, secretaria de Infraestructura de Cali, afirmó que una de las principales apuestas del gobierno del Alcalde Eder es mejorar las arterias viales de la ciudad.
Para esto, adelantarán obras para mejorar la malla vial de la ciudad. Sin embargo, este proceso puede convertirse en un verdadero viacrucis debido al déficit fiscal que hay en dicha cartera.
Esto ya que la administración anterior dejó un presupuesto de $142 mil millones para este tipo de proyectos, pero el costo real ascendería a cerca de los 2 billones de pesos. Esto teniendo en consideración que el 55% de la malla vial de los barrios de la ciudad se encuentra en mal estado.
Por el momento se espera encontrar los recursos para mejorar la maquinaria, que según la funcionaria, varias se encuentran obsoletas.