Son muchos los conductores que prefieren viajar por carretera de noche, con el fin de aprovechar ese tiempo muerto mientras llegan a su destino. Otros, en especial los de servicio público, cumplen intensas jornadas durante el día y luego cumplen con la delicada labor de guiar un vehículo con pasajeros a bordo. Sin embargo, pocos son conscientes de que que así como es peligroso conducir bajo efecto del alcohol, también lo es manejar sin haber dormido bien, ante lo cual muchos optan por tomar café o una bebida energizante o por abrir la ventana. Pero al parecer, estas medidas no bastan. De acuerdo con Santiago Rojas, asesor en descanso, si una persona no ha dormido bien es muy probable que pase por un corto periodo de somnolencia crónica de hasta cinco segundos (el estado entre el sueño y la vigilia) inconscientemente. Los momentos más críticos donde el ser humano tiende a sufrir microsueños es después de almorzar y entre las 2 y 6 de la mañana -que es cuando la gente aprovecha para conducir-, porque son los periodos donde el cuerpo está muy cansado por la actividad del día asegura Rojas. Es ahí cuando se pierden reflejos, la concentración y las personas entran en un estado de embotamiento y torpeza, los cuales son efectos a los que no podría reaccionar efectivamente si de repente el auto se sale de la vía, se cruza algún transeúnte o algún carro se mete en el camino y como consecuencia se puede producir un accidente. A continuación, presentamos algunas recomendaciones al respecto: Dieta: Es recomendable que antes de viajar no consuma alimentos con alto nivel de grasa ni leche, porque contienen triptófano, un propulsor de la serotonina, que es un neurotransmisor que induce el sueño. Siesta: Haga una siesta en el camino para que pueda tener un ciclo de recuperación y así mantenga la concentración al volante. Eso sí, lo importante es que la siesta no exceda los 40 minutos, porque podría entrar a la etapa de sueño profundo y el cuerpo lo consideraría una interrupción, provocando aún más sueño y mal ánimo.Actividad: Pare cada dos horas o cada 200 kilómetros y camine por 15 minutos para que el cuerpo pierda la noción de una actividad monótona, ya que conducir por largos recorridos genera somnolencia.Dormir bien: Duerma mínimo ocho horas diarias en los dos días anteriores al viaje.Asegúrese de dormir en una cama cómoda, con un colchón semiduro que se adapte a las formas del cuerpo y que no genere puntos de presión que impidan la buena circulación y obligue a la persona a interrumpir el sueño profundo. Cuide también la ventilación y la oscuridad del cuarto.