Una alteración orden público en el colegio Santa Isabel de Hungría Sede Decepaz, oriente de Cali, fue reportada a través de redes sociales. Al parecer, profesores y personal estarían encerrados por jóvenes del barrio que no los dejan salir.
En vídeos publicados en Twitter se puede apreciar cómo varios jóvenes intentan entrar al centro educativo a la fuerza, queriendo tumbar las rejas de la institución. “Aquí todos para adentro, aquí nadie para atrás” se escucha decir a un joven en uno de los videos.
Inmediatamente, al lugar de los hechos arribaron las autoridades judiciales, para controlar los desmanes provocados por varios jóvenes. En los videos se puede ver la indignación de algunos padres de familia ante la situación y la trifulca de algunas personas.
Los hechos son confusos y no ha habido un pronunciamiento de las autoridades que especifique las razones de la alteración. Voces de la comunidad señalan que hay acusaciones contra un profesor por abuso de menores, pero la información no es oficial.
De hecho, la comunidad ha argumentado que las directivas de este plantel no han dado una debido solución y manejo al caso del presunto abuso sexual y que incluso se estaría protegiendo al implicado, lo que hizo que las personas tomaran vías de hecho.
Tras lo anterior, los docentes pidieron ayuda inmediata de las autoridades, ya que temían por sus vidas, pues eran varios los adolescentes que formaron los desmanes a las afueras del colegio.
Cali, en alerta máxima por ataques contra la Fuerza Pública, ¿qué está pasando?
Luego de que hace varias semanas explotara una granada en el CAI del barrio Alfonso Bonilla Aragón y de que fuera abandonado otro artefacto de este mismo tipo en el CAI del barrio Mojica, pero que afortunadamente no explotó, las alertas en Cali están encendidas por parte de las autoridades para evitar más hechos que afecten el orden público.
Sobre el primer hecho, que ocurrió pasadas las 9:00 p.m. y que dejó a un canino sin vida, las autoridades anunciaron que fueron dos hombres, quienes se transportaban en una motocicleta, los que lanzaron el artefacto explosivo.
“Dos sujetos se movilizaban en motocicleta, uno de estos bajó del automotor, se acercó a las instalaciones y lanzó un artefacto explosivo. Lamentablemente, se presentó la muerte de un perro de nombre Negro que convivía con los uniformados, pero no tenemos ninguna afectación contra la integridad y vida de nuestros hombres”, aseguró el coronel William Quintero, subcomandante de la Policía de Cali.
Entre otros detalles, el oficial señaló que los vecinos del sector informaron que los hombres se movilizaban en una motocicleta Pulsar de color negro y ambos portaban prendas oscuras, por lo que se revisaron las cámaras de seguridad de la zona. “Desplegamos todas nuestras capacidades de policía judicial, Gaula y de inteligencia con el fin de dar con la ubicación y captura de los responsables de este hecho terrorista”, añadió.
Lo preocupante es que seis horas después de este hecho, otra granada fue lanzada contra el CAI del barrio Mojica y por fortuna no explotó. Tras el acordonamiento de la zona, personal de antiexplosivos adelantó el proceso de detonación controlada para evitar un mayor riesgo a la comunidad.
A través de Twitter, el secretario de Seguridad y Justicia de Cali, Jimmy Dranguet, confirmó que las capacidades investigativas fueron reforzadas para localizar a los responsables de estos recientes ataques contra la policía.
“A los criminales que quieren amedrentar nuestra fuerza pública, afectar a nuestros ciudadanos y causar terror en la ciudad les informamos que doblaremos nuestras capacidades de prevención y reacción para identificarlos y judicializarlos”, trinó el funcionario.
¿Qué se busca con estos ataques?
“Los grupos insurgentes siempre tratan de mostrarse más fuertes de lo que son, en ese sentido, incidentes como los de las banderas y el de un artefacto explosivo que no tenía sistema de activación obedecen a la misma motivación y es tratar de mostrar que pueden actuar dentro de la ciudad de Cali con cierta libertad, con cierta facilidad e intimidar a personas en diferentes sectores”, explicó el exasesor de seguridad de Cali y especialista, Alberto Sánchez.
El experto sostuvo que, aunque las banderas del ELN fueron puestas en el corredor de la calle 5 y el explosivo fue en el oeste, lo que quieren demostrar los diferentes grupos armados es que tienen una relativa libertad de movimiento dentro de la ciudad.
Asimismo, Andrés Felipe Galindo, experto en seguridad, señaló que, aunque en la actualidad las guerrillas no tienen la capacidad militar para operar en las ciudades como lo hacían hace algunos años, “sí tienen una capacidad de generar zozobra y enviar mensajes de intimidantes”.
Ambos especialistas coinciden en que, aunque los grupos armados han venido dejando mensajes en la ciudad, esto no quiere decir que tengan capacidad operativa, sin embargo, Sánchez sostuvo que es importante que “la Policía debe empezar a establecer de manera estratégica, dentro de la institución y hacia la ciudadanía, cuál es la magnitud de la amenaza que representan las disidencias en Cali”.