La Alcaldía de Cali informó este martes que está revisando los últimos detalles para habilitar la sede sur de la clínica Saludcoop, que servirá para mejorar la capacidad instalada en la ciudad para atender a potenciales casos de Covid-19.

En conjunto con la Red de Salud del Oriente E.S.E, se ha venido trabajando en mejorar la capacidad de ese centro asistencial para tener un formato de cuidados intensivos que pueda ser utilizado en el caso de que la demanda de pacientes así lo requiera.

De acuerdo con Javier Arévalo, gerente de la ESE oriente, la clínica contará con 26 unidades de cuidados intensivos y 60 camas de cuidados intermedios. Hasta el momento se han invertido aproximadamente 2.200 millones en mantenimiento de la infraestructura física, entre 7 mil y 8 mil millones en equipos y en el recurso humano que oscila entre un millón y millón y medio en atención al día por cama.

Por su parte, el médico y alcalde de Cali, Jorge Iván Ospina, dijo que los costos en unidades de cuidados intensivos son muy altos para todos, para la familia para el paciente, pero también para la institución que presta el servicio.

“Una unidad de cuidados intensivos es una unidad de altísima especialización, necesita tener monitores, respiradores, gases, 24 horas de laboratorio clínico, enfermeros y médicos”, explicó.

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Para recuperar esta clínica se trabajó en varias fases; la primera era la recuperación de la estructura física, que  ya está culminando, ahora se está trabajando en la segunda, que consiste en la dotación de equipos y la gestión para obtener en el más corto tiempo los respiradores necesarios.

El funcionamiento de la clínica será de acuerdo a la demanda. Si se llega a tener un pico epidémico que no pueda ser resuelto por las unidades de cuidados intensivos de la ciudad, ingresaría al servicio de la Clínica Champagnat.

Para finalizar, el mandatario de los caleños manifestó que la ocupación promedio en las unidades de cuidados intensivos en Cali no alcanza el 62%, lo que muestra que hay una oportunidad para atender a los usuarios.

“Este 62% se debe a varias cosas; una, a que se ha reducido la ocupación por trauma; dos, porque se ha reducido la ocupación por enfermedad o intervenciones programadas, que posteriormente demanda unidades de cuidados intensivos. Este tipo de cirugía programada fue congelada en la ciudad en el marco de la crisis y por eso se utilizan menos estas unidades y también porque el esperado pico del COVID-19 no lo hemos tenido en la ciudad y en ese sentido no hemos tenido que utilizar las unidades”, señaló.