Los Bomberos Voluntarios de Cali reportaron sobre las 7:21 de la noche un incendio en el barrio Juananbú, en el oeste de la ciudad, cerca al tradicional Cerro de Las Tres Cruces.
En el sector fue necesaria la presencia de dos maquinas de bomberos con 8 unidades y un carro tanque con 2 unidades, quienes controlaron rápidamente las llamas que alcanzaban varios metros de altura, pero que no colocaron en riesgo la vida de las personas que viven en zonas aledañas al lugar de la conflagración.
El País conoció que el incendio era de vegetación seca debido a las altas temperaturas que se han registrado en Cali durante la semana que esta por terminar. Además, se conoció que la expansión de las llamas afecto un terreno de aproximadamente una hectárea.
¿Una maldición? La historia detrás de las tres cruces en Cali
Se trata de una leyenda urbana que se creó a partir del racismo que se vivía en la época colonial y cuando traían en barcos a las personas esclavizadas al puerto de Cartagena.
La historia del Cerro de las Tres Cruces en Cali va más allá de que estas fueron levantadas para recordar que la ciudad está protegida por Dios, sino que en realidad, en el momento en que las construyeron, lo hicieron para proteger a la capital vallecaucana del “Buziraco” o el dios Changó, de los Orishas.
La historia se remonta al momento en el que a Cartagena empezaron a llegar las personas esclavizadas con sus tradiciones como la de orarle a los Orishas, de donde sale chango. La religión católica empezó a evangelizar quitándoles su identidad a estas personas, pero lo que no lograron es que dejaran su espiritualidad a un lado y por eso llamaron a Fray Alfonso de la Cruz Paredes para expulsar a Changó o el ‘Buziraco’.
Él llega con otras personas a expulsarlo de Cartagena asegurando que era el mismísimo diablo y que por eso tenía patas de macho cabrío. Después de la supuesta expulsión, se dice que el ‘Buziraco’ recorre las ciudades en donde están los cimarrones llegando a Cali, en donde empiezan a asociar los incendios en sus cerros con la presencia de Changó.
La iglesia se encarga de esparcir este rumor y empieza de nuevo una “cacería” en contra del ‘Buziraco’. Es allí cuando llaman a representantes de la Arquidiócesis de Cali y dos frailes suben a cerro decidiendo la construcción de las tres cruces para proteger a la ciudad.
En 1925, Cali sufrió un terremoto que tumbó las tres cruces de madera; por supuesto, le atribuyeron esto al supuesto demonio y decidieron construirlas en cemento para atrapar definitivamente al ‘Buziraco’.
Con los años, el Cerro de las Tres Cruces se ha convertido en un lugar turístico en Cali, pero hay una leyenda urbana que quedó alrededor de todo esto que se hizo en la ciudad por allá en los 1800: se dice que cuando se sale a bailar en alguna de las discotecas de la ciudad y hay un hombre negro muy atractivo, lo más probable es que sea el ‘Buziraco’. Si baila muy bien, pero le dice que no le mire los pies, es seguro que es Changó.
¿Cómo se dio el cerro de las Tres Cruces?
Marco Tulio Collazos, un padre de tez morena y de amabilidad sin par, quien fue el primer párroco de la Iglesia de Santa Rosa en el centro de la ciudad de Cali, fue el encargado en 1937 de darle vida a las cruces que hoy conocemos.
Para ello, afirman los historiadores, contrató los servicios de Argemiro Escobar Cardona, un joven ingeniero civil de La Unión, Valle. Éste, había participado anteriormente en el diseño de diversas vías en el departamento.
En la construcción de las mismas intervinieron 80 hombres durante casi un año para darle vida a este ‘tesoro’, ubicado en uno de los pulmones verdes de la ciudad, a 1.480 metros sobre el nivel del mar.
Luego de muchos imprevistos, la construcción fue finalizada el 6 de enero de 1938.