Ricardo Bonilla, ministro de Hacienda de Colombia, aseguró que a partir de hoy, sábado 3 de agosto de 2024, empezará a aplicar el aumento del diésel para grandes compradores.
“A todos los que buscan el diésel en las estaciones de servicio, eso va a comenzar a regir, pero hay que ajustar 6.000 pesos también, como fue con la gasolina. Hay que ajustarlo, no puede ser de la misma manera porque los transportadores de carga no pueden ajustar todos los meses las tarifas de fletes, entonces lo que se está buscando con ellos es un mecanismo con el cual no quede en el imaginario que por el aumento en las tarifas se va a disparar la inflación”, anunció Bonilla, en medio del Congreso Nacional de Fondos de Empleados.
Esto se da porque, según explicó el Ministro, ante la situación financiera del país no se pueden seguir manteniendo congelados los precios del Diesel en Colombia, por lo que anunció que en lo que queda de este y el próximo año, los precios de ese combustible deben subir al menos 6 mil pesos por galón.
“No hemos llegado a ningún acuerdo, está la discusión allí y hay una brecha de 6 mil pesos. Es una brecha que se debe cerrar entre este y el próximo año. Es insostenible seguir pagando el déficit, cuando estamos pagando la otra deuda, si nos fijamos en esto eso es lo que tenemos, una deuda que no es considerada deuda pública y lo que nos implica que en el 2022-2023 pagábamos 37 billones, se comió las dos reformas tributarias. Este año estamos pagando 20 billones del 23 y si no hacemos nada este año, aunque ya está el decreto de los grandes consumidores, aquellos que consumen más de 20 mil galones mensuales, vamos a quedar en una situación muy difícil”, dijo el jefe de la cartera de Hacienda.
Sin embargo, en múltiples ocasiones el gremio de los transportadores ha dicho que hay que considerar otros factores antes de hablar de un incremento en el precio del combustible, Alfonso Medrano, presidente de la Cámara Intergremial de Transportadores (Unidos), señaló que hay muchas variables como la inflación que envían señales de que no es pertinente que el combustible suba.
“No tiene sentido hablar de incremento en el diésel, teniendo en cuenta, además, que el costo de los fletes están estancados. En estas condiciones, un alza significaría la quiebra para el camionero”.
Por su parte, Arnulfo Cuervo, Vicepresidente de Fedetranscarga, considera que ahora que se dio ese paso (alza para grandes consumidores) no sería raro que siga el incremento del combustible para el resto del transporte.