Alejandra Giraldo, una de las presentadoras más queridas y reconocidas de Noticias Caracol, reveló recientemente uno de los episodios más oscuros de su vida. Aunque hoy se le conoce por su carisma y amor por los animales, hubo un tiempo en el que su historia estuvo marcada por el horror.

El suceso ocurrió en Medellín, su ciudad natal, el jueves 17 de mayo de 2001, cuando era una joven que disfrutaba de la vida nocturna con sus amigos. Aquella noche, Giraldo y una amiga decidieron encontrarse en el Parque Lleras, una de las zonas más concurridas de la ciudad. Sin saberlo, estarían en el lugar equivocado, en el momento equivocado.

Alejandra Giraldo se ha caracterizado por su carisma. | Foto: @alegiraldop

Todo transcurría con normalidad hasta que, en un instante, una explosión sacudió la zona. Se trataba de un carro bomba que dejó un rastro de destrucción, dolor y desesperación. “Recuerdo que estaba con mi amiga, me di la vuelta para decirle que fuéramos al baño, y en ese momento... boom”, relató la presentadora en una entrevista con La Red, de Caracol Televisión.

El impacto fue devastador. Al despertar, solo podía distinguir humo, luces y sonidos aturdidores. Estaba cubierta de sangre y sentía un dolor indescriptible. Las esquirlas del estallido le causaron heridas en las piernas y el rostro. “Perdí la visión media, se me desencajó la mandíbula, pero estaba completa, estaba viva”, confesó con la voz entrecortada.

Su amiga, sin embargo, no tuvo la misma suerte. “Ella tenía la mano en la cara y me preguntó ‘¿Qué tengo?’, y no tenía el ojo”, recordó con tristeza. La escena fue desgarradora: ambulancias, gritos y desesperación llenaban el lugar. En los días posteriores, los médicos extrajeron una a una las esquirlas incrustadas en su piel, en un proceso largo y doloroso.

El ataque no solo dejó heridas físicas, sino también emocionales. Durante mucho tiempo, Giraldo sufrió episodios de ansiedad y miedo, reviviendo constantemente aquella noche trágica. Superar el trauma requirió un trabajo personal profundo, apoyo de sus seres queridos y una determinación inquebrantable. “Cada vez que escuchaba un ruido fuerte, mi corazón se aceleraba. Fue un proceso largo, pero aprendí a seguir adelante”, relató.

A pesar de la tragedia, Giraldo no quedó con secuelas físicas graves, más allá de algunas cicatrices en sus piernas. En una reciente entrevista con The Suso’s Show, compartió su testimonio y mostró las marcas que le quedaron de aquella noche fatídica.

Hoy, la periodista ve su experiencia como una segunda oportunidad. “Lo importante es que estoy viva y puedo contar mi historia”, reflexionó. Su valentía y resiliencia la han convertido en una figura admirada por muchos, demostrando que, a pesar de las adversidades, es posible seguir adelante con fuerza y determinación. Su historia no solo es un testimonio de supervivencia, sino también un ejemplo de cómo el espíritu humano puede sobreponerse a las pruebas más difíciles.

Hoy, la periodista ve su experiencia como una segunda oportunidad. | Foto: Semana

Desde entonces, Alejandra Giraldo ha seguido consolidando su carrera como periodista, convirtiéndose en una voz confiable en los hogares colombianos. Su amor por los animales y su dedicación a causas sociales han hecho que su imagen trascienda más allá de la pantalla, inspirando a quienes la siguen y valoran su trabajo. Cada vez que aparece en televisión, lo hace con la misma pasión de siempre, recordándose a sí misma y a su audiencia que la vida es frágil, pero también preciosa.