En horas de la mañana de este 12 de agosto, se registró un atentado contra uniformados de la Policía Nacional en el municipio de Morales, Cauca.
De acuerdo con la información preliminar, el hecho sucedió en la vía que conduce hacia Suárez, cuando los uniformados realizaban patrullajes. La camioneta en que se desplazaban, fue emboscada por sujetos aún sin identificar, quienes dispararon sin piedad y les robaron su armamento.
En las imágenes compartidas, se observa el vehículo a un costado de la carretera, mientras que los cuerpos de los tres uniformados que fueron asesinados yacían en puntos diferentes.
Las víctimas del atentado fueron identificadas como Michael León, Jorge Laureano Orozco y Eimy Marcelina Rodríguez.
No obstante, según denunció el representante a la Cámara, Óscar Campo, se trataría de la guerrilla.
“En Morales, Cauca, arremetida de la guerrilla contra la estación de policía, hasta el momento un policía muerto y otros heridos, sigue el desangre y seguimos a la espera de un cese al fuego que no ha sido más que una burla, ¿qué dice el Comisionado de Paz?”, trinó el congresista, aunque poco después eliminó la publicación.
Hasta el momento, las autoridades no se han pronunciado de manera oficial sobre lo ocurrido, de manera que avanza la investigación para determinar qué organización criminal está detrás de este sanguinario hecho.
Reacciones
Una de las primeras en reaccionar frente al ataque a la Policía fue la senadora del Centro Democrático, María Fernanda Cabal, quien a través de su cuenta de Twitter dijo: “¡Qué dolor! ¿Dónde está escondido Gustavo Petro y dónde está su MinDefensa? Esto es insoportable”.
El ministro del Interior Luis Fernando Velasco también dejó ver su posición frente al hecho y mostró su solidaridad con la Policía y los familiares de los uniformados muertos, trinansdo en su cuenta de Twitter: “Solidaridad con la Policía Nacional y las familias de los tres policías asesinados hoy en Morales (Cauca) y condena a quienes cometieron el crimen”.
Asimismo, el candidato a la alcaldía de Medellín Federico Gutiérrez, trinó: “otros tres policías han sido asesinados en las últimas horas en Morales, Cauca. Los uniformados fueron atacados cuando protegían a la comunidad en un puesto de control. De nuevo las disidencias de las Farc con las que el Gobierno pretende realizar un proceso de negociación acaban con las vidas de nuestros policías. Ya basta de tanta protección a los criminales y desatención a nuestra Fuerza Pública. No más beneficios a los terroristas, ese no es el camino de paz total que los colombianos queremos. El Gobierno tiene la obligación constitucional de proteger a los colombianos”.
Los hechos ocurridos en la mañana de hoy se suman a lo que ya se han venido presentando en esta región del país, que siempre se ha visto golpeada por la violencia.
Como se recordará, el más reciente hecho violento se registró el pasado jueves con un explosivo en la vía que de Guachené conduce a Caloto, en el norte del Cauca, donde un uniformado de la Policía Nacional resultó herido mientras hacía parte de un dispositivo de control y registro contra el que fue lanzado un artefacto.
En ese momento, el comandante del Departamento de Policía del Cauca, coronel Ricardo Archila, violento confirmó que se llevarán a cabo investigaciones exhaustivas para dar con los responsables del ataque.
“Se presenta una explosión, al parecer una granada contra un personal adscrito a la Estación de Policía de Guachené que en ese momento se encontraba adelantando el despliegue de planes preventivos de registro y control a personas y vehículos”, informó el oficial.
Añadió que “Resulta afectado por aturdimiento un uniformado que de manera inmediata fue trasladado a un centro asistencial. La Policía rechaza estos actos. Adelantaremos las investigaciones pertinentes para dar con la captura de los autores de estos hechos”.
Horas antes también se había presentado un hecho en el que presuntos integrantes de la estructura ilegal Dagoberto Ramos instalaron dos retenes ilegales. En los sitios se presentaron combates con el Ejército, por lo que varios conductores fueron obligados a detener su marcha; una buseta de servicio público fue atravesada y fue frustrada una acción violenta contra las tropas con la utilización de dos cilindros con explosivos.