Fuertes combates entre el Ejército y la columna Dagoberto Ramos, de las disidencias de las Farc, se reportan en Toribío, Cauca, desde el mediodía de este domingo, 7 de abril. Según las denuncias de las comunidades, habitantes de varias veredas están en medio del fuego cruzado.
El director de Indepaz, Leonardo González, hizo una publicación que advierte que los combates se están desplazando hacia El Tierrero, en el resguardo de Huellas, municipio de Caloto. En esta zona confluyen los territorios indígenas de Tacueyó, Huellas, San Francisco y Jambaló.
A través de redes sociales circulan videos que evidencian que la población civil de este municipio del Cauca está en riesgo. De acuerdo con una grabación, un grupo de personas se encontraba en un salón comunal, cuando se desataron los enfrentamientos entre uniformados del Ejército y disidentes del llamado Estado Mayor Central.
Esta versión indica que el salón comunal de la vereda El Damián, donde varias personas se resguardaron, ha recibido varios impactos de bala. “Estamos en el salón comunal, que es el sitio de concentración para resguardarnos en el conflicto armado. El salón comunal ha recibido impactos en el techo, en el piso y en las paredes”, narra un hombre en el clip.
Desde la Tercera División del Ejército confirmaron que las tropas del Comando Específico del Cauca se enfrentan contra integrantes del frente Dagoberto Ramos con el fin de proteger a las comunidades de Toribío. “La ofensiva de nuestros soldados contra los factores de inestabilidad, avanza”, aseguraron poco antes de las 5:00 de la tarde de este domingo.
Esta misma semana, la Asociación de Cabildos Indígenas de Toribío, Tacueyo y San Francisco advirtió en un comunicado que han descubierto la presencia de artefactos explosivos en la vereda La Despensa. “Denunciamos enérgicamente el uso de artefactos no convencionales por parte del grupo Dagoberto Ramos, así como la flagrante violación del derecho internacional humanitario”, se lee en el documento.
También en el municipio de Toribío, la líder indígena Carmelina Yule fue asesinada por el Estado Mayor Central de las Farc a mediados de marzo. Esa ofensiva llevó a que el presidente Gustavo Petro suspendiera en los departamentos del Valle del Cauca, Cauca y Nariño el cese al fuego pactado con este grupo armado.
“Este territorio de Toribío, durante la década del 2000 al 2010 y hasta el 2014, año en que se establecieron los diálogos de paz entre el Gobierno y las Farc, fue un campo de batalla. Toribío tiene 15 tomas guerrilleras, más de 500 hostigamientos, es decir que estos hechos violentos se presentan constantemente en nuestra zona”, señaló hace unas semanas el alcalde Jaime Díaz, en diálogo con El País.
En su momento, el mandatario local también advirtió que los niños no pueden caminar solos porque están expuestos a que la guerrilla los reclute. “Cuando yo estudié podía caminar una o dos horas por el pueblo y no pasaba nada, pero hoy en Toribío no puedo enviar caminando dos kilómetros a un niño porque ya está siendo interceptado por un grupo armado para ser reclutado”, expresó.