La baja venta de autos nuevos durante el 2023 prendió las alertas en los diferentes concesionarios del país, quienes en varios meses, no vendieron ni un solo vehículo de sus vitrinas.
Sin embargo, esta situación puede mejorar para el 2024, a medida que hay una serie de condiciones económicas que se pueden cumplir durante este año.
Un primer factor que podría hacer más accesible la compra de vehículos nuevos y volver más competitivos los precios para el mercado nacional es justamente una inflación que sigue su marcada senda de desaceleración.
La importación de los vehículos podría hacerse más barata en la medida en que los países productores tengan que asumir menos costos por una suerte de normalización en la producción de varios de los insumos de ensamblaje.
Teniendo en cuenta esto, la compra de carros en Colombia se podría volver todavía más barata en la medida en que el dólar siga un proceso de estabilización que no lo haga escalar más allá de los $ 4.000 y fije una tasa de cambio de menores niveles que deben asumir los importadores.
Las apuestas dan para que durante este 2024, el dólar no tenga un alza considerable y por el contario, mantenga un margen que redondea los $ 3.800 pesos.
Así mismo, la compra de carros nuevos en Colombia sería todavía más barato gracias a que las tasas de interés de los bancos seguirían bajando con fuerza, en la medida en que el Banco de la República tome esa misma decisión.
Cabe destacar que este último, ha sido uno de los principales causantes para que las personas no tomen un crédito en las diferentes entidades bancarias para adquirir un vehículo nuevo en el país.
Hacia el tercer trimestre del año se espera que la tasa de política monetaria baje hasta ser de un solo dígito, lo que llevará a que las tasas de los créditos de consumo también caigan con fuerza y se motive a un mercado que necesita fortalecerse de manera inmediata.