La más reciente deportación de venezolanos del territorio colombiano por encontrarse trabajando de manera ilegal abrió nuevamente la polémica por la llegada masiva de ciudadanos del vecino país en busca de una mejor calidad de vida, ante las dificultades que viven en su patria. Se trata del reciente caso de ocho ciudadanos venezolanos que fueron descubiertos trabajando en Medellín en la construcción en un edificio a media cuadra del Parque Lleras (el centro emblemático de la ciudad), sin tener permiso legal. Fueron identificados por oficiales de Migración Colombia y deportados en enero. Ese comportamiento se ha convertido en algo rutinario, pues la llegada de venezolanos en los últimos años ha aumentado de manera significativa, ante las precarias condiciones en su país de origen, por falta de alimentos, medicinas y seguridad. Por ejemplo, el año pasado fueron deportados 2500 ciudadanos venezolanos, según cifras de Migración Colombia. Todos se encontraban en Colombia de manera ilegal. Solamente en el primer mes de este año la cifra de deportados llegó a 160, de ellos 18 en carácter de expulsados. Cabe recordar, asimismo, el caso de 34 mujeres que fueron detectadas en abril del año pasado en varios hospedajes de Cúcuta sin la documentación para permanecer en el país. Igual ocurrió en noviembre del año pasado al descubrirse a 21 venezolanos que deambulaban por la localidad de La Virginia, Risaralda. También se han realizado deportaciones desde municipios de la costa norte como Malambo, Candelaria, Ponedera, Luruaco, Santo Tomás y Barranquilla; así como Barrancabermeja, Tibú y Bucaramanga. Según datos entregados por Migración Colombia, la entidad ha realizado 11.000 verificaciones de documentos a personas naturales y jurídicas en el último año y ha sancionado a 55 empresas por contratar a ciudadanos venezolanos sin cumplir con las exigencias de ley. El director de Migración Colombia, Christian Krüger Sarmiento, se mostró preocupado, toda vez que hay colombianos que se están aprovechando de la necesidad de los extranjeros para lucrarse y no pagar lo que corresponde por su trabajo. Creo que es importante que los colombianos entiendan las implicaciones que tiene el contratar extranjeros sin el lleno de los requisitos de ley. Para nosotros es preocupante esta situación, pues no podemos aceptar que terceros se aprovechen de la necesidad de algunos extranjeros para lucrarse y no pagar lo que les corresponde o afiliarlos al Sistema de Seguridad Social, señaló. Así mismo, invitó a que los extranjeros regularicen su situación y si quieren trabajar lo hagan, pero respetando la normatividad migratoria. Para el presidente de la Asociación de Venezolanos en Colombia (Asocvencol), Daniel Pagés, la realidad es que en los últimos años la llegada de compatriotas se ha incrementado de manera significativa, debido a la situación que vive el vecino país. Coincidió con el Director de Migración Colombia, al explicar que la necesidad con la que llegan hace que se empleen en cualquier cosa. He identificado a venezolanos vendiendo y cantando en los buses de Transmilenio porque la situación económica en Venezuela está tan mal, que prefieren venir acá a buscar otras oportunidades, anotó. Un fenómeno creciente Pagés explicó que la migración a Colombia se ha dado en diferentes etapas desde hace 14 años, cuando fue la primera ola debido a los problemas de la estatal petrolera Pdvsa, que terminó con la llegada de muchos venezolanos que trabajaban en el sector. Explicó que continuamente han existido otras olas de migración, como por ejemplo, la llegada de empresarios al país en 2008. Pero, resaltó que el venezolano que está llegando hoy es catalogado como el desplazado del Siglo XXI, porque no puede vivir en su país al no conseguir productos básicos, medicinas, ni tampoco tener la protección por parte del Estado en materia de seguridad. Por ello, según cifras entregadas por Migración Colombia, desde 2013 hasta 2016 ingresaron al país 1.260.957 venezolanos y salieron 907.642. Se cree que 353.315 personas probablemente permanecen en el país de manera irregular. Para Daniel Pagés, esta situación no va a parar por ahora, porque sencillamente el clima económico que está viviendo Venezuela no tiende a mejorar, por lo que le pidió al gobierno colombiano que abra canales de apoyo para integrar a los venezolanos, generar interacción de trabajo, para que a través de nosotros podamos apoyar a nuestros compatriotas. El empresario aseguró que desde la Asociación han sentido que no hay un apoyo por parte del gobierno de Colombia, donde se busque integrar a los ciudadanos venezolanos a la economía, con el fin de que ayuden con el desarrollo del país en vez de cerrarle las puertas. El Gobierno colombiano aún no ha formulado un pronunciamiento al respecto.