El grupo paramilitar AGC, más conocido como el Clan del Golfo, aceptó en las últimas horas la propuesta que hizo el presidente Gustavo Petro desde Urabá de poner condiciones para iniciar unos eventuales diálogos.
Sostienen que ellos no crearon las rentas ilegales, pero admiten que cobran un impuesto en el caso de la coca.
“Nos permitimos comunicar que aceptamos la invitación hecha por el señor Presidente, en el sentido de sentarnos a negociar las condiciones políticas que permitan las transformaciones sociales que todos queremos para las regiones en donde hacemos presencia”, señalaron los alzados en armas mediante un comunicado.
Asimismo, indicaron que no tienen ningún poder para crear las condiciones de que se registre el flujo migratorio que ha sucedido durante los últimos años en el tapón del Darién, algo que en realidad es todo lo contrario porque de acuerdo con Human Rights Watch, en el 2023, habría obtenido unos 57 millones de dólares producto del cobro a los migrantes que cruzan el tapón del Darién con el objetivo de llegar a Norteamérica.
“No tenemos ninguna relación con este nefasto tráfico, que se aprovecha de los sueños de los migrantes de muchas nacionalidades, para explotarlos y a menudo abandonarlos a su suerte”, aseguró el grupo armado de extrema derecha.
Por último, las AGC reiteran que están dispuestos a acudir los diálogos donde el gobierno les indique por medio de personas que han designado desde hace un tiempo atrás. “Como bien lo señala el mismo señor Presidente, este es un camino muy difícil y complejo, que estamos dispuestos a recorrer acompañados de las comunidades”, concluyeron en la misiva.
“Al perro no lo capan dos veces”: presidente Petro se refirió a posibles diálogos de paz con el Clan del Golfo
En medio del cumplimiento de su agenda del ‘Gobierno con el Pueblo’ en el Caribe colombiano, desde Apartadó (Antioquia), el presidente Gustavo Petro le envió un contundente mensaje al Clan del Golfo en caso de que este grupo criminal quiera iniciar un proceso de paz con el Ejecutivo.
En medio de su intervención, el Mandatario hizo varios reparos sobre el accionar terrorista de dicha organización, y le extendió una invitación para acogerse a un diálogo de paz auténtico, en el que no les vean “la cara de bobos”.
“Si están dispuestos a dejar los negocios ilícitos, el de los migrantes, la extorsión, el traqueteo, hablamos, pero no para vernos la cara de bobos, sino para hablar seriamente de eso, porque a mí me interesa más la verdad que vengarme o tirar bombas”, dijo el jefe de Estado.
En esa línea, Petro sentenció que si el Clan del Golfo quiere sentarse con el Gobierno a hablar de paz, pues sería el mismo Ejecutivo quien daría las condiciones del diálogo, “porque al perro no lo capan dos veces”, señaló.
A pesar de que la paz ha sido una bandera del gobierno Petro, el mandatario le hizo una dura advertencia a dicho grupo criminal, el cual, aunque viene del paramilitarismo, se dedica casi en su totalidad al narcotráfico.
“El que tiene el balón en la cancha es el Clan del Golfo, se atreve o no se atreve. Si no se atreve, guerreamos, porque la decisión es destruirlos”, aseveró. “Primero tienen que pensar antes que sentarse con el Gobierno. Yo no digo que no”, complementó.