La Cancillería se pronunció sobre la denuncia hecha por la esposa del embajador de Colombia ante la FAO, Armando Benedetti en su contra.
El canciller Luis Gilberto Murillo condenó y repudió cualquier tipo agresión o violencia contra la mujer, y confirmó que el caso fue remitido a la Oficina de Control Interno Disciplinario.
“La Cancillería repudia y condena cualquier tipo de agresión o violencia contra la integridad de las mujeres. Sobre la información pública que involucra al embajador de Colombia ante la FAO, Armando Benedetti, el Ministerio de Relaciones Exteriores se permite informar que: Hemos sido notificados de la situación por parte de nuestra Embajada en España. La Cancillería ha activado los mecanismos oficiales para conocer lo sucedido e iniciar el protocolo correspondiente”, dice el comunicado.
Y es que según se conoció, la noche del pasado domingo 30 de junio, Benedetti protagonizó un altercado en el que agredió verbalmente a su esposa, Adelina Guerrero, en su apartamento en una residencia privada de la capital española. Según informes iniciales de la policía madrileña, la situación estuvo a punto de escalarse a una agresión física, pero fue contenida por testigos presentes.
Sobre esto, Benedetti señaló que un tribunal de España demostrará lo sucedido y que en estos momentos se encuentra en un proceso de divorcio.
”Lo que se ha dicho sobre una supuesta agresión NO es cierto y NO se ajusta al hecho en España. La verdad se demostrará en el tribunal español. En este momento me encuentro en medio de un proceso de divorcio que responde a la esfera privada y familiar y, por el bien de mis hijos, seré prudente”, expresó Benedetti.
Versiones mediáticas aseguraron de un supuesto incidente entre el Embajador y su esposa en su residencia privada en la ciudad de Madrid, España.
Tras el hecho, la policía acudió al lugar del incidente, que podría ser considerado como violencia de género, según la legislación de ese país. Sin embargo, Benedetti invocó su inmunidad diplomática para evitar ser detenido y luego dejado en libertad.
*Redacción El País y Colprensa.