Más de una década después del brutal feminicidio de Rosa Elvira Cely, la justicia ha fallado a favor de las víctimas en un veredicto que condena a la Fiscalía General de la Nación y otras entidades del distrito de Bogotá por graves omisiones que permitieron el trágico desenlace. La familia de Rosa Elvira demandó al Estado, señalando una falla sistemática en el sistema de justicia y las instituciones encargadas de proteger a los ciudadanos.

El caso de Rosa Elvira Cely conmocionó a toda la sociedad colombiana en el año 2012, cuando su cuerpo fue encontrado en los cerros orientales de Bogotá, víctima de una violación, empalamiento y tortura. Ahora, más de una década después, la justicia finalmente ha reconocido la responsabilidad de las entidades estatales en este feminicidio y en la falta de medidas para proteger la vida de Rosa Elvira.

Rosa Elvira Cely fue víctima de feminicidio en el año 2012.

El juzgado de Bogotá, tras un exhaustivo análisis de las pruebas presentadas en la demanda, concluyó que la Fiscalía General de la Nación y otras entidades del distrito tienen una clara responsabilidad en los hechos que condujeron a la muerte de Rosa Elvira Cely. La investigación reveló que el feminicida, Javier Velasco Valenzuela, ya tenía procesos penales en su contra, incluso una condena por otro feminicidio, pero a pesar de ello, permanecía en libertad representando un riesgo latente para las mujeres.

Uno de los elementos fundamentales en la demanda fue el abuso sexual perpetrado por Velasco contra sus hijas menores en el año 2007, proceso que, al momento de la tragedia, aún estaba en averiguación en la Fiscalía. Esta grave omisión permitió que el feminicida continuara en libertad y cometiera el brutal acto contra Rosa Elvira.

“Falta de contundencia”

El fallo del juzgado destacó la falta de contundencia y efectividad de la Fiscalía en los diferentes procesos penales que enfrentaba Velasco. Si la entidad hubiera actuado con mayor diligencia, es probable que el feminicida hubiera sido condenado y privado de su libertad, evitando así la muerte de Rosa Elvira. La decisión del juzgado señaló claramente la negligencia de la Fiscalía en el cumplimiento de su deber y cómo esto permitió la perpetuación de la conducta criminal de Velasco.

Con un encuentro reflexivo sobre los derechos de la mujer, fue levantada una placa en honor a Rosa Elvira Cely.

Además, se reveló que Velasco ya había sido condenado por otro feminicidio, pero la Fiscalía no investigó si en ese caso hubo acceso carnal violento. Esta falta de investigación adecuada contribuyó a que Velasco fuera remitido a un centro psiquiátrico en lugar de una cárcel, permitiéndole seguir libre y cometer el feminicidio de Rosa Elvira Cely.

Otro aspecto importante que se reveló durante la investigación fue la falta de atención oportuna a las llamadas de emergencia realizadas por Rosa Elvira. Esto demostró la responsabilidad de las entidades del distrito de Bogotá en facilitar el crimen al no brindar una respuesta adecuada y garantizar la seguridad de la víctima.

Millonaria indemnización

El fallo del juzgado condenó a las entidades estatales por el daño antijurídico causado a los demandantes y ordenó una indemnización superior a los 1.300 millones de pesos. Esta compensación busca reparar los perjuicios sufridos por la familia y las víctimas debido a la negligencia del Estado en proteger a Rosa Elvira y garantizar justicia en este caso.

Más de mil personas salieron a protestar en Bogotá, cuando se conoció el aterrador caso.

La decisión del juzgado ha sido considerada histórica, ya que marca un precedente en la lucha contra la violencia de género y la negligencia institucional en casos de feminicidio. La condena a la Fiscalía y otras entidades de Bogotá por su responsabilidad en este brutal feminicidio envía un claro mensaje sobre la importancia de garantizar la seguridad y protección de las mujeres en Colombia.

Este veredicto ha sido recibido con alivio y esperanza por parte de la familia y las víctimas, quienes han luchado incansablemente por obtener justicia para Rosa Elvira. Sin embargo, también pone de relieve la necesidad de continuar trabajando para erradicar la violencia de género y mejorar la respuesta institucional frente a estos crímenes.