La Iglesia católica confirmó la información previamente anunciada en los medios de comunicación, en los que se reveló que las disidencias de las FARC lideradas por alias ‘Iván Mordisco’ y el Gobierno nacional han mantenido contactos para evaluar la posibilidad de establecer una mesa de diálogo.

Estos encuentros han contado con el apoyo de la Iglesia católica, la Misión de Apoyo al Proceso de Paz de la OEA, delegados de la embajada de Noruega y la ONU. Durante estas reuniones se han logrado alcanzar dos acuerdos significativos.

Las disidencias de Iván mordisco aseguraron que están dispuestas a asumir las responsabilidades de las acusas que llevaron a la suspensión del cese al fuego. | Foto: Long Visual Press/Universal Imag

“En estas sesiones se ha acordado retomar el proceso de acercamiento a la mesa de diálogos entre ambas partes, con una fase preliminar en la que se establecerán las condiciones para el desarrollo de dicha mesa y los mecanismos de participación. También se acordó retomar el proceso de cese al fuego, ajustando los mecanismos de verificación y profundizando en la comprensión de las normas y protocolos”, señaló el padre Eliécer Soto, secretario general de la Comisión de Conciliación Nacional.

Es importante recordar que en mayo, el Gobierno nacional decidió suspender el cese al fuego bilateral con las disidencias de Iván Mordisco tras el asesinato de tres menores de edad reclutados por este grupo ilegal en Putumayo.

Disidencias de ‘Iván Mordisco’ asumen la responsabilidad por el asesinato de niños indígenas en Putumayo

En un comunicado emitido el martes 23 de mayo, las disidencias lideradas por alias ‘Iván Mordisco’ asumieron la responsabilidad por el asesinato de tres jóvenes indígenas en Putumayo.

Este grupo ilegal afirmó que las víctimas no fueron reclutadas de forma forzada, sino que se unieron voluntariamente y que cumplían con la edad “exigida por el derecho internacional humanitario para el reclutamiento de combatientes”.

Aunque el contenido es grave, según las disidencias, el asesinato de los menores de edad se produjo debido a que “violaban los estatutos” al infiltrarse en sus filas para llevar a cabo “delitos graves, como ubicación de campamentos, comandantes y otras operaciones de inteligencia”.

El Frente Primero tenía aproximadamente unos 110 integrantes y la disidencia que se presentó es de alrededor de 60 hombres, señalaron jefes de las Farc. | Foto: COLPRENSA ©

Las universidades de Harvard y Sinú trabajan por la paz de Colombia

En el marco del VII encuentro ‘Psicología Positiva, la Ciencia de la Felicidad y la Paz’, se celebró la firma del acuerdo de cooperación entre la Universidad del Sinú, Elías Bechara Zainúm y la Universidad de Harvard, para la implementación del programa Ciencia para la Paz que permite que las dos universidades trabajen de la mano y desde la Academia como un aporte a la paz de Colombia.

La Universidad de Harvard y la Universidad del Sinú han venido desarrollando un trabajo en común que desde su creación ha utilizado una metodología basada en la ciencia, destacado por sus intervenciones con víctimas del conflicto en el departamento de Córdoba y otras regiones del país, reinsertados de la antigua guerrilla de las FARC, estudiantes universitarios y docentes. Entre otras acciones, según un comunicado, “este acuerdo ha permitido implementar en Colombia la campaña de perdón más grande del mundo, obteniendo resultados sobresalientes”.

Para Richard Cowden, investigador asociado al programa de Florecimiento Humano de la Universidad de Harvard, “esta nueva asociación reviste gran importancia porque durante los próximos 5 años se enfocará en promover el florecimiento humano en varias poblaciones que van desde las comunidades universitarias hasta las poblaciones vulnerables. Este proyecto también tiene como objetivo apoyar el proceso de paz en Colombia y extenderse más allá de esos ideales”.

Por su parte, la rectora de la Universidad del Sinú, María Fátima Bechara Castilla, indicó que “desde la Universidad del Sinú, esperamos que este acuerdo de cooperación nos lleve a construir caminos que logren el bienestar para nuestras comunidades, es de una importancia enorme para nuestra región y para todo el país. Esperamos abrir espacios en esa construcción, llegar a más personas, mejorar la calidad de vida y dar nuevas oportunidades a los jóvenes, a los profesores, a las familias y a toda la comunidad”.

De izquierda a derecha: María Fátima Bechara (rectora de la Universidad del Sinú), Horacio Torres (vicepresidente de la Academia Colombiana de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales) y Andrea Ortega Bechara (fundadora del programa Ciencia para la Paz). | Foto: Pablo Salgado Photography