El mayor infanticida de la historia de Colombia, Luis Alfredo Garavito, conocido como ‘La Bestia’ o ‘El Monstruo de Génova’ falleció en la mañana de este jueves, 12 de octubre, en un hospital de Valledupar (César).
La confirmación la dio a conocer el Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec) tras señalar que Garavito estaba presentando graves quebrantos de salud.
Garavito estaba recluido en la cárcel de máxima seguridad La Tramacúa por los delitos sexuales que cometió a cerca de 142 a 194 niños, niñas y adolescentes. Los cargos por los cuales estaba respondiendo estaban relacionados con el acto sexual violento, acceso carnal violento, secuestro simple, incendio culposo y homicidio.
Hace unos años, a Luis Alfredo Garavito se le había diagnosticado cáncer de leucemia, el cual estaba en un estado avanzado.
En diferentes imágenes que se habían distribuido por medio de la editorial Testigo Directo se evidenciaron el estado de salud deteriorado, en la cual se veía más delgado.
Cabe señalar que también sufrió de un cáncer ocular, por lo cual, debido a la gravedad del mismo, perdió su ojo izquierdo.
Su enfermedad fue detectada en 2020 y se identifica con leucemia linfática crónica, motivo por el cual requería una atención especializada. Sin embargo, es importante mencionar que en 2021, tenía la opción de recuperar su libertad, sin embargo, decidió quedarse en el centro penitenciario, pese a su estado de salud.
Según la información que entregaban las autoridades, esto se debía a que Garavito temía por su seguridad, por lo cual prefería quedarse en el establecimiento carcelario y no asistir a los centros médicos en donde podía ser tratado.
En 2021, el exdirector de la cárcel Tramacúa en Valledupar, el mayor César Fernando Caraballo Quiroga, indicó que Luis Alfredo Garavito había cumplido las tres quintas partes de su condena. Sin embargo, él decidió no solicitar la libertad condicional en donde podía cumplir su pena en arresto domiciliario.
“La salud de Garavito está bastante deteriorada. Yo lo vi a él antes de abril, la salud de él estaba deteriorada. Tiene cáncer de piel y otro que en este momento no me acuerdo. Nosotros lo teníamos desde el año pasado en enfermería. Él está esperando a que le lleguen más procesos para acumularlos, pero igual no le van a aumentar la pena”, señaló en su momento a los medios de comunicación el exoficial.
Sobre las imágenes que se conocieron de Garavito, fueron gracias a una serie de entrevistas que aceptó entregarle a los periodistas Rafael Poveda y Kevin Pinzón, que hacen parte de la editorial Testigo Directo.
La entrevista exclusiva la concedieron en 2020, sin embargo, las imágenes se dieron a conocer a inicios de 2023.
“Nunca supimos por qué Garavito accedió a darle esa entrevista a él, y no a los cientos de periodistas que también la buscaron. En enero de 2020, Kevin me llama y me dice: ‘Tenemos a Garavito’. Sentí que ese material podía convertirse en un libro”, precisó el periodista Rafael Poveda, cuando salieron estas imágenes a la revista Semana.
Sobre la enfermedad, los periodistas habían señalado que en ese momento, es decir, en 2020, él tenía una verruga en el ojo izquierdo que era cancerígena, por lo que el ojo estaba casi cerrado. Posteriormente, supieron que ya la tenía completamente cerrado y que esta tenía leucemia.
La condena que estaba cumpliendo Luis Alfredo Garavito era de 40 años, pese a que en 2001, tras su captura en 1999, había sido condenado a 1.853 años y 9 días de prisión.
En medio de las confesiones que entregó a las autoridades, dio a conocer los lugares en donde enterró los cuerpos de sus víctimas y admitió que se camuflaba como campesino, sacerdote, indigente, vendedor ambulante o cualquier otro disfraz que le permitiera atraer a niños y adolescentes de edades comprendidas entre los ocho y dieciséis años.