El jefe negociador en los diálogos de paz con el ELN, Juan Camilo Restrepo, criticó este jueves los últimos atentados cometidos por esa guerrilla contra el oleoducto Caño Limón-Coveñas, uno de los más importantes del país, a tres días de que entre en vigor el cese al fuego bilateral pactado en Quito.

"La actuación del ELN en los últimos días verdaderamente es insensata e inexplicable y, desde luego, censurable porque estamos frente a un crimen ecológico de magnitudes descomunales", dijo Restrepo a medios de comunicación.

Ecopetrol denunció este miércoles que "grupos al margen de la ley" atacaron el oleoducto Caño Limón-Coveñas, ubicado en el noreste de Colombia, que el martes había sido blanco de otro atentado. El ELN ha sido el responsable en reiteradas ocasiones de los ataques a esta estructura, por lo que las autoridades presumen que esta vez también se trataría de su acción criminal.

Lea también: 'Nuevo ataque al oleoducto Caño Limón-Coveñas fue atribuido al ELN'.

El ataque ocasionó la caída de crudo al río Cubugón, lo que obligó a ubicar "diques para controlar las trazas remanentes aguas abajo del sitio de la rotura".

El pasado 4 de septiembre el presidente Juan Manuel Santos anunció el acuerdo bilateral de alto al fuego que, según Restrepo, "es el primer documento de paz que se firma con el ELN en 50 años".

El acuerdo pactado en la mesa de Quito tendrá una vigencia inicial de 102 días, es decir que irá hasta el 12 de enero del próximo año, y contará con la verificación en terreno de las Naciones Unidas y la iglesia.

Con la entrada en vigor del acuerdo el próximo domingo, el ELN se comprometió formalmente a no atentar contra la infraestructura, incluyendo los oleoductos, resaltó Restrepo.

Sin embargo, indicó que si el ELN "está pretendiendo fortalecerse con estos hechos frente a la mesa están equivocados porque no se va a dejar amedrentar ni va a firmarles nada de lo que no crea que es lo razonable en este proceso de paz".

En ese sentido, señaló que esos actos hacen que la guerrilla entre "con el pie equivocado al proceso de paz" y al "cese al fuego que requeriría buena fe y no dar estas señales tan torpes en los prólogos de entra a este cese al fuego".