El presidente Juan Manuel Santos reveló que la última cifra entregada por los organismos de socorro da cuenta de 254 personas fallecidas tras la avalancha que se registró el fin de semana en Mocoa, Putumayo.
Luego de la catástrofe que deja también 203 heridos y cerca de 300 familias afectadas, los habitantes de Mocoa están en incertidumbre y no saben lo que va a pasar con parte de la ciudad. Muchos han salido de su territorio hasta poblaciones como Puerto Asís, Villa Garzón y otras ciudades como Neiva y Pasto.
Entre las 254 personas muertas, 43 de ellas eran menores de edad. En total se han identificado 45 cuerpos. Hasta el momento no se han reportado desaparecidos. Entre los 203 heridos, 68 fueron remitidos en tiempo récord: 48 a Neiva y 20 a Popayán.
La emergencia se registró el pasado viernes a las 11:45 p.m. luego de que los ríos Mulato, Sangoyaco y Mocoa, tras una fuerte lluvia, se desbordaron trayendo consigo una avalancha de lodo y rocas que afectó al menos 17 barrios de esta población.
Hoy, la capital del Putumayo sigue a oscuras, muchos damnificados dormirán cerca de las casas en ruinas y otros en cercanías al hospital, único sitio donde hay energía proveniente de una planta.
Durante todo el día hicieron rescates por parte de los organismos de socorro, pero siguen apareciendo cadáveres, no solo bajo los escombros, sino en las orillas de los ríos y en sembrados de fincas de los sectores rurales, donde fueron arrastrados por la avalancha.
Moradores de los sectores rurales de Mocoa, como la vereda San José del Pepino, les informaron a las autoridades que hay cadáveres hasta en las copa de los árboles. Bertha Sinsajoa una de las sobrevivientes, dijo que en la vereda la avalancha alcanzó un poco más de tres metros de altura y que lamentablemente la zona se ha convertido en un cementerio improvisado, puesto que las aguas arrastraron hasta allá varios cadáveres.
Con la población, todavía en estado de choque, sin agua potable ni electricidad, los habitantes de Mocoa esperaban a las puertas del cementerio o examinaban las listas que cuelgan en el hospital en busca de sus seres queridos.
Asimismo, se conoció que desde Bogotá arribaron 20 buses con familiares de las víctimas, así como personas que todavía no saben qué destino tuvieron sus allegados. También se informó que desde distintos puntos del país como Cali, Pasto, Antioquia, Cauca y el Eje Cafetero se desplazaron personas para buscar parientes de los cuales no se tiene noticia.
Víctor Andrés Montenegro, quien buscaba a su esposa y su hermana entre las listas del hospital, vivía la confusión y el temor que sufren los supervivientes. “En mi corazón no siento que estén muertas, pero el momento que viví (cuando se produjo la avalancha) sentí morir y no creo poderlas encontrar con vida”.
Por su parte, el presidente Juan Manuel Santos sostuvo que cerca de 1800 personas hacen las labores de rescate y apoyo a los familiares de las víctimas. “Se han puesto a disposición más de 10 helicópteros, 6 aviones, 63 vehículos, 7 botes y eso nos ha permitido avanzar de forma muy rápida”, dijo Santos.