El corregimiento de Juanchaco, en Buenaventura, está en emergencia. Debido al fuerte oleaje y a la puja del mar en los últimos días, varias casas, restaurantes y hostales frente a la playa quedaron en escombros y tuvieron que ser desalojados. Al restaurante Sarita, por ejemplo, el piso se le desfondó en la noche de este martes, debido a la erosión costera. Lo mismo sucedió con el restaurante La Sazón de Rosa, así como varios hogares que debieron ser desalojados. “Tuvimos que subirnos a la loma porque el mar ya se entró hasta las casas y ha tumbado paredes debido al fuerte oleaje. El mar se traga cada vez más la arena de la playa, por lo que lo pisos se desfondan”, contó Mónica Murillo, una de las damnificadas.
El abogado Castor Asprilla Mosquera, quien instauró una acción de Tutela contra la Alcaldesa de Buenaventura, Ligia del Carmen Córdoba, y el Director de la Unidad de Gestión del Riesgo Nacional, Carlos Alberto Carrillo, debido a la “inacción” frente a la erosión costera en el corregimiento, denuncia que la misma no ha sido contestada. “Estamos ante la crónica de un desastre anunciado. El mar ya se metió completamente a Juanchaco y las autoridades no han hecho nada, pese a las denuncias judiciales y de los medios de comunicación”, comentó.
La comunidad pide ayuda humanitaria pronto para enfrentar la situación que cada noche es peor en está época de fuertes vientos, lo que hace que aumente el oleaje del océano Pacífico.