El exclusivo alojamiento ubicado en zona rural del municipio de Villamaría (Caldas), conocido como El Nido del Cóndor está envuelto en una polémica debido al hecho ocurrido este miércoles, 26 de diciembre, cuando cinco personas que, al parecer, trabajarían en este hotel, estuvieron por más de 18 horas suspendidas en el vacío. Todo esto causado por una falla en el sistema de transporte tipo teleférico que usaban para cruzar de una montaña a otra donde está ubicado el hotel, el cual quedó varado a mitad del trayecto y los dejó colgando de una góndola, suspendida a 250 metros de altura.
A la media noche del miércoles, después de un operativo de rescate sin precedentes, organismos de socorro como los Bomberos Voluntarios de Caldas, la Cruz Roja y el Ejército Nacional lograron rescatar a las cinco personas que estaban corriendo un riesgo inminente de caída.
No obstante el desenlace afortunado, aún queda por saberse cuál fue la causa de la falla en el sistema de transporte que, según información preliminar, se trata de un mecanismo artesanal. Además, no se ha conocido ninguna declaración por parte de los dueños de El Nido del Cóndor, a quienes pertenecería la estructura que generó estas circunstancias de peligro.
El Nido del Cóndor es un hotel que, a pesar de promocionarse como ecológico y sostenible, entra en la categoría de lujo y exclusividad por sus costosos servicios. Por esta razón, es recomendado en diferentes agencias de viajes como “una experiencia única” en medio de la naturaleza.
Hasta ahora se ha logrado determinar que una de las poleas, que se extienden de forma horizontal por los 530 metros que separan una montaña de la meseta donde está ubicado el hotel, se reventó cuando los cinco empleados se trasportaban muy temprano en la mañana, a las 6:30 a.m. del miércoles.
Según contaron a medios, después de salir ilesos, mientras estuvieron colgando en el vacío, pasaron por momentos en que lloraban y rezaban, incluso temían lo peor. Estas personas están recibiendo apoyo psicológico por parte de la Secretaría de Salud de Caldas.
Por su parte, la Alcaldía de Villamaría y la Personería de este municipio informaron que solicitaron los permisos y controles con los que debe contar esta estructura de transporte, que es usada por los empleados y turistas que acceden al exclusivo hostal, que solo consultando en su web oficial se puede comprobar que una noche de hospedaje cuesta 1′650.000. Cabe aclarar que el precio incluye comidas y actividades ecológicas.
¿Quién es el dueño del lujoso hotel?
Aunque diferentes medios han intentado comunicarse con voceros de El Nido del Cóndor, para confirmar si las personas que estuvieron en riesgo trabajan para el hotel, o si cuentan con los permisos y pólizas para los riesgos que implica utilizar este medio de transporte con poleas, pero no hay respuesta alguna.
Según documentos oficiales consultados por El Tiempo, al parecer, el dueño sería el arquitecto manizaleño Jaime Botero Medina. A él se atribuye la creación de varios espacios ecológicos en Colombia.
De acuerdo con la declaración de un lugareño de la zona donde se ubica el hotel, Botero Medina “es el propietario y administrador junto con su esposa”. Y corroboró, al igual que mencionaron los familiares de uno de los rescatados, que recientemente la góndola había fallado, no es la primera vez que sucede.
El arquitecto también sería propietario de la empresa Conguadua SAS, dedicada a la construcción de estructuras y la distribución de combustibles gaseosos para tuberías. De hecho, Conguadua SAS ha celebrado contratos con entidades estatales como el Ministerio de Cultura y con la empresa de Renovación y Desarrollo Urbano de Manizales.
Por su parte, Juan Alba, director de la Asociación Hotelera y de Colombia (Cotelco) seccional Caldas, afirmó a El Tiempo que “ellos tienen los papeles en regla. Por el momento no les vamos a hacer ninguna solicitud, ellos en su momento aclararán lo sucedido”.
Desde la Oficina de Gestión del Riesgo de Caldas, aseguraron que solicitaron la documentación del estado y mantenimiento de la góndola. Sumado a esto, la Personería de Villamaría solicitó que la góndola no se utilizará más hasta comprobar que todo esté en regla y se garantice la seguridad de los usuarios.
Otra incógnita sobre este incidente, es saber si había turistas y otro personal en el hotel, porque tendrían que regresar por otro medio de transporte, ya que la góndola es ahora objeto de investigación.