Se empiezan a conocer detalles importantes acerca del fenómeno registrado en cercanías al volcán Cerro Bravo, donde la salida de gases en una de sus laderas género varias situaciones como el cierre preventivo de un conducto de gas.

Esta decisión se tomó debido a las altas temperaturas en el interior de esta humeante montaña, lo cual dejó a 6 departamentos sin gas, y a millones de hogares y empresas en una situación realmente dramática.

El Servicio Geológico Colombiano, (SGC), indicó que uno de los aprendizajes de esta situación es que en la superficie de un volcán pueden suceder muchas cosas, pero que no siempre estás se relacionan con su actividad.

Temperaturas en el volcán Cerro Bravo | Foto: Captura de video Twitter @ecosalvacio

A esto se sumó la ausencia de otros gases de origen volcánico como el dióxido de azufre, así como el comportamiento estable del volcán Cerro Bravo, que se mantiene en nivel de actividad verde.

“Aunque se corroboró que en el punto de la anomalía el suelo registra altas temperaturas, cercanas a los 700 grados centígrados, no se encontró ningún indicador que demuestre que estas temperaturas, así como la salida de gases y vapores, tengan relación con la actividad del volcán, pues se encuentran muy focalizados y superficiales”, indicó el SGC.

También se hizo claridad acerca de los vídeos que se conocieron sobre este fenómeno, ya que las tonalidades rojizas y amarillas hacían creer que se trataba de roca fundida o magma, pero en realidad era producto del calentamiento excesivo de la superficie.

Ya que esta salida de gases y vapor en la ladera de Cerro Bravo no se relaciona con la actividad volcánica, el SGC considera que es urgente la vinculación a las investigaciones de otras entidades nacionales para conocer con precisión el origen del fenómeno y la manera en la cual será manejado.

La entidad recuerda que desde 1995 se hace un monitoreo permanente al volcán Cerro Bravo, el cual no presenta ninguna actividad anormal en la última década, por lo que la salida de gases puede obedecer a una actividad orgánica o de origen humano.

Este se denomina como un estratovolcán caldérico activo con dos calderas concatenadas de 1.5 y 1.0 km de diámetro y muy violento. Actualmente está en reposo. | Foto: Servicio Geológico Colombiano

Aclara además que los análisis que se desarrollen de aquí en adelante acerca de las anomalías térmicas, las cuales se continúan registrando en la ladera del sector La Virgen, están fuera de las competencias del Servicio Geológico Colombiano.

Tal es el caso de Victoria Mejía Bernal, experta en magnetismo y materiales avanzados, con estudios de lavas y paleosuelos; quien indica que el interior de Cerro Bravo es un terreno escarpado con turbas, que es un material orgánico enterrado y rico en carbono.

Este forma una especie de masa esponjosa en la que permanecen algunos componentes vegetales, que según la investigadora no se debe confundir con el compost o compostaje.

Igualmente, el experto en geología, geotecnia y movimientos de masa, Gonzalo Duque Escobar, dijo que esta situación puede ser consecuencia del levantamiento del suelo por una acumulación de sedimentos.

Explicó que la montaña está formada por varios domos de lava o erupciones lentas de magma viscosa, las cuales se van mezclando con el paso de los años para formar algo parecido a capas de tierra.

Mientras continúan los análisis de la situación para conocer el manejo que se le debe dar a la salida de gases, las medidas de enfriamiento han sido fundamentales para restablecer la normalidad en el suministro de gas domiciliario y vehicular en el occidente y el sur del país.

Investigadores del Servicio Geológico Colombiano en Cerro Bravo, analizando la situación. | Foto: El País

El teniente Jorge Iván Quintero Jaramillo, quien es el comandante del Cuerpo Oficial de Bomberos de Manizales, explicó que se utilizó una técnica conocida como apiques, la cual consiste en perforar el suelo circundante para aplicar agua de manera controlada en los focos de calor.