A las 9:30 a.m. de este domingo 26 de noviembre se reportó un sismo con epicentro en Zarzal, Valle del Cauca, el cual tuvo una magnitud de 4,0 y una profundidad de 136 kilómetros, el cual se sintió en Manizales, Cali y Roldanillo, según los reportes en redes sociales de los internautas.
A pesar de la fuerza del movimiento telúrico, fuentes del Cuerpo de Bomberos de Zarzal, confirmaron a El País que no se registraron damnificados por el temblor y que el resto de la jornada transcurrió en tranquilidad, es más, de acuerdo con ellos, muchos habitantes no lo sintieron, por lo que no se generó pánico en la población de este municipio al norte del Valle del Cauca.
En redes sociales algunos ciudadanos comentaron desde donde sintieron el temblor, uno de ellos aseguró que en Pereira, Risaralda, lo percibió, otros aseguraron que en Armenia, en Manizales y en Dosquebradas sí se percataron del movimiento, mientras que otros se sorprendieron debido a que en el epicentro no se enteraron del sismo.
Pero este no fue el primer sismo del domingo, puesto que a las 7:08 a.m., hora local en Riosucio, Chocó. El Servicio Geológico Colombiano informó que el sismo tuvo una magnitud de 3,6 y una profundidad de 5 kilómetros, el cual tampoco generó emergencias, afortunadamente.
¿Por qué hay tantos temblores en Colombia?
Es importante tener en cuenta que los sismos son un fenómeno natural frecuente en la geología de Colombia. Esto debido a que se encuentra en una zona sísmicamente activa.
El país tiene una alta probabilidad de actividad sísmica debido a que se encuentra en la intersección de las placas tectónicas de Nazca y Sudamérica.
A pesar de que los expertos aseguran que no hay forma de predecir un temblor, sí existen varias herramientas tecnológicas que ayudan a dar un aviso previo, esto con segundos de anticipación del movimiento telúrico.
¿Por qué hay personas que no sienten los temblores?
Según el geólogo Armando Espinoza, profesor de la Universidad del Quindío, hay dos razones principales que explican por qué algunas personas no experimentan temblores.
La influencia de la posición de una persona durante un temblor es el primer factor que menciona Armando Espinoza a un medio de comunicación colombiano. Sus explicaciones indican que la intensidad de un temblor depende en gran medida de la posición corporal del individuo en ese momento.
“No se trata de que haya personas que sienten los sismos y otras que no. La intensidad con la que sentimos un temblor depende de la posición de la persona y el sitio donde esté”, explicó el experto.
Un ejemplo sucede cuando una persona se encuentra acostada durante un temblor, su cuerpo entra directamente en contacto con una superficie que luego entra directamente en contacto con el suelo. Esta conexión física más cercana a la tierra puede aumentar la percepción de los movimientos telúricos.
El tipo de suelo de una persona puede afectar su percepción de un terremoto. Los suelos blandos pueden amplifican las ondas sísmicas, por lo que las personas en áreas con suelos de esta propiedad pueden sentir terremotos con mayor intensidad.