A casi dos meses de haber asumido la gerencia de la Federación Nacional de Cafeteros (FNC), Germán Bahamón, acompañado de su equipo de trabajo, ha implementado importantes cambios al interior de la organización y, a través del montaje de toda una estrategia comercial y técnica, se espera que introduzca una revolución a la industria cafetera del país.
Desde el 26 de abril y tras ser elegido gracias al respaldo de los diferentes comités regionales, quienes incluso llevaron la contraria al presidente Gustavo Petro, que pidió aplazar la decisión para que el nuevo Ministro de Hacienda la revisara, Bahamón ha impulsado algunas decisiones que podrían tornarse incómodas.
Por ejemplo, asumió la no sencilla tarea de realizar una reestructuración al interior de la FNC eliminando cargos directivos, bajo el principio de austeridad en la oficina central de Bogotá.
Para los medios han sido claros por lo menos cinco cambios en cargos importantes que sostenían personas de confianza incluso desde hace más de dos décadas.
Dos de ellos se dieron en la Dirección de Gestión de Proyectos, también se cambió la Dirección Social y la Ambiental, además de la jefatura de prensa que había permanecido intacta durante las últimas tres administraciones de la Federación.
En este sentido, el mismo empoderamiento proveniente de las regiones que le entregaron su voto de confianza le ha permitido al ejecutivo hablar sobre cambios necesarios por desórdenes administrativos en sectores como los de Almacafé, cuyo gerente y subgerente salen de la empresa.
Adicional a las decisiones directivas, se encuentra la implementación de toda una estrategia comercial y técnica con el fin de incorporar la variedad de café Robusta en el país, un tema que nunca se había tocado al interior de la entidad que cumple 96 años el próximo 27 de junio.
La llegada de Bahamón también supone un conocimiento profundo del estado de la entidad que toma con el fin de determinar las mejores acciones, por eso también está en curso una auditoría que permitirá evaluar el rumbo de la Federación y establecer objetivos en el mediano y largo plazo tal vez diferentes.
“He vivido en mi piel la caficultura y tengo una experiencia de más de 20 años de trabajo corporativo que me permitiría traer esa experiencia de comercio exterior y de trabajo corporativo a una entidad tan importante como la Federación. Estoy con la firme intención de aportar mi grano de arena a la caficultura colombiana”, destacó Bahamón en una entrevista entregada a Semana sobre el gremio que representa a unas 540 mil familias en todo el país y que influyeron en su elección.
Pese a estas buenas intenciones y revolución que el nuevo gerente promete, desde que asumió su cargo no se ha reunido con uno de los actores más importantes para el sector; el Ministerio de Hacienda en cabeza del también recién designado Ricardo Bonilla.
Pese a que Bonilla sí se ha reunido con varios empresarios del sector, le dijo a Bloomberg Línea que el encuentro con el gerente Bahamón “está pendiente de organizar” y, pese a que no se conoce aún una razón clara, en su momento la elección sorpresiva no fue del agrado del presidente Gustavo Petro.
“Pensé que era el tiempo del diálogo y la construcción común. Dialogaré con sus organizaciones de base regionales”, trinó recién se produjo la decisión el Presidente.
Incluso en declaraciones posteriores, el Presidente fue mucho más enfático: “No está bien que en el Congreso cafetero hayan cercenado la democracia. Nunca se debió vetar candidatos solo para escoger a quien se pudiera oponer al Presidente”, mencionó Petro.
Pese a estos pronunciamientos previos aún no puede afirmarse que entre la FNC y el Gobierno existan desacuerdos o enojos, ambos sectores inician caminos donde deberán construir y trabajar conjuntamente en beneficio de uno de los sectores económicos más representativos para el país.